El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha garantizado que el negocio de Bankia "está estabilizado" en la actualidad, después de las "turbulencias muy importantes" sufridas entre mayo y octubre en el contexto de la nacionalización de la entidad.

"Bankia tiene una calidad a prueba de bombas", ha sentenciado Goirigolzarri durante la rueda de prensa en la presentación de resultados correspondientes a 2012, en la que ha reconocido pérdida de "atracción" de clientes y salida de depósitos durante el episodio de nacionalización.

El máximo dirigente del banco nacionalizado ha asegurado que la entidad ha remontado en los dos últimos meses esta circunstancia producida en el verano y ha vuelto a niveles similares a marzo de 2012, antes de la nacionalización.

Goirigolzarri ha querido trasmitir un mensaje de "tranquilidad" a los más de siete millones de clientes de Bankia y ha descartado perder cuota de mercado frente a las grandes entidades que no han requerido ayudas públicas. "La marca está golpeada, pero la transformación de la entidad ha sido radical", ha enfatizado.

Misma confianza que el resto de bancos.

En su defensa de Bankia, ha asegurado que "nadie" puede cuestionar la solvencia del banco nacionalizado y ha reivindicado una confianza de los clientes "que no es inferior" a la de otros bancos españoles.

"Nadie puede tener ninguna duda sobre la solvencia de la entidad, y eso se traduce en una confianza en los depositantes y en los clientes reales y potenciales. Es una confianza distinta a la que daba hace nueve meses", ha explicado.

Cierre de oficinas.

Con el objetivo de reducir la "incertidumbre" que se pueda generar en los clientes, el presidente de Bankia ha avanzado que antes del verano se unificará la marca en las sucursales de Madrid y Valencia.

Goirigolzarri ha asegurado que esta red de unas 1.200 oficinas que suman estos dos territorios estará "perfectamente reordenada" a finales de mayo, mientras que la reestructuración del total de sucursales se materializará este año y "probablemente" una parte en los primeros meses de 2014. "Los clientes pueden estar extraordinariamente tranquilos, porque la entidad es solvente y líquida", ha insistido.