El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) interpondrá, en la Audiencia Nacional, siete querellas por gestión desleal contra la antigua cúpula del Banco de Valencia y contra varios empresarios, a los que acusan de causar un perjuicio patrimonial de en torno a 500 millones de euros.

Con esta decisión, adoptada el pasado jueves tras una reunión de la junta rectora, el FROB pretende recuperar, según fuentes financieras, el máximo capital posible de los 4.500 millones que tuvo que inyectarle al Banco de Valencia para sanear el agujero causado por las operaciones derivadas de esta presunta gestión desleal. Así, las acciones judiciales se dirigen contra los máximos directivos de la entidad pero, especialmente, contra su ex consejero delegado, Domingo Parra, además de contra varios empresarios que se habrían beneficiado de operaciones de financiación o créditos.

Según ha explicado el director general del FROB, Antonio Carrascosa, las querellas, fruto de nuevas investigaciones periciales,se harán públicas "muy rápidamente". Así, fuentes financieras matizan que se interpondrán la próxima semana ante el Juzgado de la Audiencia Nacional, cuyo titular es Santiago Pedraz, que instruye esta causa desde el pasado mes de junio, cuando el FROB denunció a los exresponsables de la entidad por estafa, apropiación indebida y administración desleal.

Esa primera denuncia se dirigía también contra Parra, además de contra su socio, Aurelio Izquierdo, y el presidente de Aguas de Valencia, Eugenio Calabuig. De acuerdo a ese escrito, el ex consejero delegado habría intervenido en una serie de operaciones "de dudosa racionalidad económica" al haber obtenido beneficios en perjuicio del patrimonio del banco, al que provocó un agujero de casi 137 millones de euros.

Por otro lado, un grupo de accionistas ya presentó una querella contra 27 exdirectivos de la entidad en un juzgado de instrucción, que se inhibió a favor de la Audiencia Nacional. No obstante, esta decisión fue recurrida por las defensas, lo que ha motivado que Pedraz rechazase, momentáneamente, asumirla, a la espera de que la Audiencia Provincial de Valencia se pronuncie de manera firme.