Alrededor de 400 personas han querido respaldar esta mañana en Logroño la concentración promovida por la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública para reivindicar "un sistema sanitario público de calidad, sostenible y solidario".

La plaza del Mercado ha sido el lugar elegido por la Plataforma para llevar a cabo la concentración que ha comenzado a las 12,00 horas. Según ha explicado uno de sus portavoces, David García, con esta iniciativa "no venimos a protestar" sino que lo que pretenden es realzar "el valor positivo de la sanidad pública y contrarrestar la marea de privatizaciones". Se trata de "defender lo público" porque "se puede hacer mejor, más barato, más solidario y lo que tiene que ser un derecho de todos nunca puede ser un negocio para unos pocos".

Para los miembros de la Plataforma, la situación del hospital de Calahorra y "los amagos por privatizar la dirección del centro", la pérdida "de cantidad de efectivos", el contar con "hospitales con camas cerradas" y ejemplos concretos como la situación del hospital de La Rioja "que funciona por debajo de la mitad de su rendimiento" o ver "los aparatos de última tecnología parados" son "muestras más que suficientes" para que los ciudadanos se den cuenta de que "hay intereses particulares y económicos".

A pesar de que no están en contra de la sanidad privada, desde la Plataforma indican que "primero hay que usar todos los medios de la sanidad pública, a sus profesionales y a sus medios técnicos porque no se puede sacar un beneficio particular".

Recogida de firmas

Con la concentración de este domingo, en la que también se han recogido firmas para "exigir al presidente de la Comunidad de La Rioja, Pedro Sanz, que se utilicen los medios públicos", David García asegura que "sentimos el apoyo de la ciudadanía".

Con las firmas, explica, pretendemos "llegar a toda la ciudadanía" porque "su salud no puede depender de motivos económicos".

Durante la concentración, además, se ha leído un comunicado en el que ha quedado patente que la salud "se debe considerar como un derecho y no una mercancía, porque es un instrumento básico de cohesión social y de seguridad para personas y familias".