La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de la Región de Murcia ha anunciado que va a hacer un seguimiento y van a "fiscalizar" la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que pide una moratoria para los desahucios y la dación en pago admitida este martes por el Congreso, de forma que no van a consentir una modificación de la misma.

En este sentido, la Plataforma ha advertido que la admisión a trámite de la ILP no quiere decir que el proyecto vaya a ser aprobado íntegramente, sino que una comisión parlamentaria formada por diputados se van a encargar ahora de su negociación y "pueden introducir mejoras o modificarla hasta desnaturalizarla".

"Esto no ha terminado, es ahora cuando empieza la posibilidad de cambiar las cosas", según han hecho saber en rueda de prensa el portavoz de la PAH de la Región de Murcia, Paco Morote; el sacerdote y miembro de la Plataforma, Joaquín Sánchez; la abogada de la organización, Ana Martínez; y dos de las afectadas, Carmen Ruiz y María Fernández.

Los miembros de la Plataforma se han mostrado "sorprendidos" por el cambio de postura del PP, que en principio no iba a admitir a trámite la ILP, y han admitido que no se lo esperaban, pero consideran que "no podían hacer otra cosa", al tratarse de un proyecto "justo, democrático y lógico".

En concreto, defienden que la Iniciativa es justa "porque evita los abusos que llevan emparejados el terrorismo financiero", y es democrática porque "está avalada por 1,4 millones de españoles que firmaron a favor de la misma", ha explicado Morote, portavoz de una plataforma que ha paralizado 102 desahucios en toda la Región, y que recibe cada semana a unas 50 familias afectadas.

En este sentido, ha advertido que van a seguir "muy pendientes" de cómo progresa su trámite en el Congreso, "fiscalizando" la labor de los diputados. Consideran, a este respecto, que las únicas medidas que pueden hacer "justicia" son las recogidas en la ILP. Y eso que se trata, advierten, de una propuesta "de mínimos", porque lo máximo a lo que aspiran es al reconocimiento de la vivienda "como un derecho fundamental".

Martínez ha reconocido que, tras la admisión a trámite de la ILP, tienen un "sabor agridulce". Por un lado, se alegran de que la Iniciativa haya sido admitida tras "más de cuatro años de lucha y de mucho sufrimiento", pero advierte que no van a admitir que una propuesta de mínimos "se modifique" para "quedarse en nada al final".

Recuerda que la PAH no se creyó hace un año el Código de Buenas Prácticas propuesto por el Gobierno central a las entidades financieras. Por eso decidieron impulsar la ILP y seguir informando y asesorando a la ciudadanía, sin creer "los mensajes envenenados que criminalizan a las víctimas".

Manifestación este sábado

Sánchez explica que, desde que estalló la situación de paro y precariedad, a la gente "se le ha robado la vida, la ilusión y el futuro". Por ello, reclama el derecho a una vivienda y una vida "con dignidad", e insta a la población a participar en la manifestación convocada el próximo sábado, 16 de febrero, en Murcia, y la concentración prevista ese mismo día, a la misma hora, en la plaza ICUE de Cartagena.

"Hay que seguir luchando", apostilla Sánchez, quien recuerda que las protestas han sido convocadas para reclamar el derecho a la vivienda. Por ello, espera que la manifestación sea un grito "que arranque del dolor de las víctimas", y Morote ha hecho un llamamiento a toda la ciudadanía y, especialmente, a las 45.000 personas que firmaron la ILP en la Región de Murcia.

La manifestación, que ha sido anunciada a la Delegación del Gobierno "con antelación suficiente", partirá a las 18.00 horas desde el jardín de Floridablanca de Murcia y recorrerá las calles del centro de Murcia.

En concreto, tiene previsto pasar por la calle Princesa, cruzar el río por el puente Nuevo hasta la plaza de la Cruz Roja, recorrer la avenida Teniente Flomesta y la calle Correos hasta la plaza de Cetina, desde donde se dirigirán a la plaza de la Cruz, junto a la Catedral.

A partir de ahí, los participantes van a empezar un 'via crucis' simbólico por las sedes centrales de las entidades financieras, a las que se quiere dedicar la manifestación, y donde los afectados tienen previsto realizar diversas actuaciones.

La marcha seguirá por la calle Trapería hasta la avenida Alfonso X, pasando por la calle Jaime I y Gran Vía, hasta llegar a la sede del Banco de España. Además, la marea de movilizados en favor de la enseñanza pública se unirá a la manifestación a su paso por la plaza de Santo Domingo.

Testimonio de una de las afectadas

Una de las afectadas, María Fernández, ha contado su experiencia y ha explicado cómo se vio abocada a la situación que le llevó al desahucio. En concreto, recuerda que antes de firmar la hipoteca vivía con su marido, que cobraba una pensión, y ella llevaba 23 años trabajando en el sector conservero.

En ese momento, afrontaba el pago de un pequeño préstamo y vivía en una casa vieja heredada de sus padres con una hija y un nieto. Sin embargo, lamenta que todo cambió en noviembre de 2002, cuando decidió contraer una hipoteca con Cajamar para adquirir una casa nueva por la que tenía que pagar 1.100 euros al mes.

Ese mismo mes, su hija de 27 años murió, y les dejó a su cargo a la nieta de nueve meses. "El mundo se me hundió", reconoce entre lágrimas Fernández, quien explica que tomó dos años de baja porque no podía soportar la situación.

Posteriormente volvió a trabajar, pero fue despedida en 2007 con una indemnización porque no era apta para desempeñar esas labores, ya que tenía cuatro hernias discales.

Lamenta que firmó el préstamo tras ser convencida por un primo que le pintó todo "de color de rosa", pero reconoce que, desde entonces, "todo es un infierno"· Ahora, afirma que le queda "la gente de la PAH, que me apoya y me hace reír".

Los miembros de la Plataforma explican que, de momento, los casos más frecuentes suelen corresponderse con las hipotecas contraídas con el Banco Sabadell-CAM y con Bankia, así como de otras entidades filiales de grandes bancos, y que se han dedicado a otorgar "hipotecas basura" durante la época de la burbuja inmobiliaria".