La escuela madrileña Blankpaper imparte este sábado en La Térmica el segundo de sus talleres de fotografía, que busca sacar el arte a la calle. Para ello, los alumnos, en grupos de trabajo, captarán imágenes de los rincones de Málaga durante este fin de semana.

Éste es el segundo de los tres talleres que esta escuela impartirá hasta el mes de marzo y que se titula 'Inventa Málaga'. El objetivo del mismo es generar un nuevo formato de trabajo en el que los participantes, fotógrafos aficionados, trabajen colectivamente en un proyecto participativo que permita sacar el arte a la calle.

En esta jornada los profesores Fosi Vegue y Ricardo Cases han proyectado y analizado varios trabajos de fotógrafos consolidados para guiar y dar herramientas a los alumnos y que ellos puedan desarrollar una narrativa propia. Posteriormente, el trabajo de campo consiste en realizar fotografías de todos los rincones de Málaga divididos en cuatro grupos de trabajo atendiendo a las tipologías 'paisaje', 'retrato', 'ambiente' e 'interiores'.

Los docentes editarán la selección final de instantáneas y el resultado podrá verse en una exposición o mediante una proyección. La duración del taller es de 16 horas con una participación de 30 alumnos, según han informado desde la Diputación a través de un comunicado.

Fue en Madrid donde tuvo el origen esta iniciativa, y su primera edición, 'Inventa Lavapiés', fue un curso fotográfico gratuito para 50 personas que se celebró con la colaboración del Ministerio de Cultura, el Laboratorio Digital de Creación 'Se Muestra' y Epson.

Blankpaper es el primer colectivo de fotografía nacido en España, en el año 2003. A sus integrantes, Fosi Vegue, Antonio Xoubanova, Óscar Monzón, Ricardo Cases, Mario Rey, Alejandro Marote y Julián Barón, les une la obsesión por conocer el mundo a través de una cámara de fotos de una forma práctica y divertida.

Hoy en día, según este colectivo, una cámara de fotos está al alcance de cualquiera, pero la sociedad padece un grave "analfabetismo fotográfico", de ahí que sus miembros consideren que es necesario un proceso educativo en tres fases: aprender a mirar, a utilizar la cámara y a decodificar lo capturado.

La intención de este taller es generar un nuevo formato de trabajo en el que los mecanismos de creación contemporánea se pongan a disposición de artistas y público en general para producir proyectos participativos que permitan sacar el arte a la calle.

El pasado fin de semana tuvo lugar el primer taller, 'Iniciación a la fotografía', que reunió a una quincena de aficionados que aprendieron a sacar mayor partido a sus cámaras. El programa se presentó como la carta de restaurante y estaba formado por los entrantes, el primer y segundo plato y el postre.

Las actividades de la escuela Blankpaper seguirán los días 2 y 3 de marzo, cuando se impartirá el último curso, 'Microtalleres Fotográficos para Niños y Jóvenes', en el que a partir de la fotografía, y explorando la creatividad innata de los niños de entre 8 y 16 años, se pretende fomentar el deseo y la curiosidad de mirar el mundo.