La empresa Cementos Cosmos aplicará un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en su fábrica de Toral de los Vados (León) y en la de Oural (Lugo), que afectará a un máximo de 30 trabajadores y que será negociado con los representantes laborales, según ha comunicado la dirección a través de un comunicado remitido a Europa Press.

Cosmos ha adoptado esta decisión "después de analizar la situación presente y futura" y de "estudiar posibles alternativas" dentro de un entorno "absolutamente regresivo del sector". La planta finalizó 2012 con sólo seis meses de producción y otros tantos de parada.

"La imposibilidad de que la fábrica mantenga un ritmo mínimo de producción en los ejercicios de 2013 y 2014" ha constituido el argumento que ha conducido a esta decisión. De acuerdo con las mismas fuentes, el objetivo inmediato es "ganar en eficiencia y reducir costes".

Esta situación "se agrava", a juicio de la empresa, con el incremento previsto de un 16 por ciento en la factura eléctrica para 2013. El consumo eléctrico supone para la industria cementera un 18 por ciento de los costes totales de producción y un 32 por ciento de los variables, lo cual es un factor añadido en la merma de competitividad con respecto a los países emergentes.

La compañía está reestructurando todas sus plantas. La de Oural está inmersa en un ERE que afecta a 28 trabajadores, mientras que en los centros fabriles de Córdoba, Niebla (Huelva) y Bobadilla (Antequera) ya se han aplicado regulaciones de empleo.

La dirección formará un equipo conjunto de trabajadores de Toral de los Vados y de Oural para atender ambas plantas. La distribución de personal y productos se mantendrá "hasta que el mercado supere la atonía actual y se pueda recuperar el ritmo de producción en una y otra fábrica".

El sector

El sector cementero cerró el pasado año con una caída del 33 por ciento y registró el quinto ejercicio consecutivo de descenso, dado que la demanda interior está por debajo del consumo de 13 millones de toneladas, según ha explicado la empresa.

Las previsiones que maneja la patronal cementera (Oficemen) se mantienen a la baja en 2013, para el que se estima un nuevo descenso cercano al 20 por ciento, con una demanda doméstica de en torno a 11 millones de toneladas. Cosmos ha confirmado que estas cifras obligan a remontarse a 1962 para encontrar datos tan exiguos.