El horizonte que se divisa en el panorama científico español es aterrador. Los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy están provocando que numerosos proyectos de investigación se vean paralizados y que las jóvenes mentes nacionales se hayan tenido que buscar el futuro en el extranjero.

El Presupuesto General del Estado para 2013 dedica a I+D+i 5.562 millones, una cantidad similar a la que recibió el sector hace ocho años. Desde 2009, el gasto en investigación se ha reducido en un 40%, según datos de un informe del Instituto Nacional de Estadística (INE). Las comparaciones con Europa también son odiosas: España destina a innovación un 1,33% del PIB, muy lejos de la media (2%) de nuestros socios continentales.

Esta realidad contrasta, sin embargo, con los últimos avances en materia científica protagonizados por investigadores españoles, quienes, entre otros, han diseñado la primera vacuna para la prevención del alzhéimer y un novedoso tratamiento contra el cáncer de pulmón.

"Esto demuestra que la apuesta por la ciencia española no es vano, que hay talento para apostar por la investigación", ha comentado a 20minutos.es Emilio Criado, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y miembro de Comisiones Obreras (CC OO).

"Los descubrimientos que se han hecho son con fondos que vienen de atrás. El problema es que con los recortes se está poniendo en riesgo la continuidad de muchos proyectos futuros que han generado grandes expectativas", ha añadido Criado, que ha advertido del riesgo de que en unos años no haya relevo generacional para los científicos más veteranos: "Nos estamos quedando sin jóvenes investigadores. En el CSIC, por ejemplo, han despedido a 1.000 personas en el último año, la mayoría jóvenes".

Según datos de 2012 de INNOVACEF, un informe anual sobre la situación de los jóvenes investigadores españoles, el 76% tiene altas posibilidades de marcharse al extranjero, lo que representa un incremento del 14% respecto a 2011 (62%).

Otro hecho que ha agregado un grano más de pesimismo es la reciente aprobación del Plan Nacional de I+D+i, un eje fundamental para la investigación en nuestro país. El Gobierno ha reducido el presupuesto a 309 millones, casi un 20% menos que en la convocatoria anterior.

Para mayor desgracia de los 3.282 proyectos de investigación aprobados, el dinero lo recibirán en cuatro años en lugar de en tres como hasta ahora, lo que supondrá un gran contratiempo, ya que dispondrán de menos recursos para finalizar el proyecto en el plazo estipulado, que es de tres años.

"Estamos poniendo en riesgo los avances que hemos conseguido con mucho esfuerzo en los últimos 25 años",  ha opinado Emilio Criado, que se ha lamentado también de la situación de la Universidades Públicas, de donde salen dos tercios de las investigaciones científicas.