La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestrutura mantiene cerrado al tráfico pesado los puertos de montaña de O Cebreiro (entre los kilómetros 0 y 6), San Roque (PK 6-10), Poio (kilómetros 10-20), LU-633 (Pedrafita N-VI-Alto do Hospital) y Viduedo (0 al 7) en la carretera LU-637.

Además, la Xunta de Galicia recomienda precaución y circular con cadenas para el resto de carreteras afectadas por la nieve en las provincias de Lugo y Ourense.

Según el parte hasta las 8.00 horas de este miércoles, la situación de las carreteras de titularidad de la Xunta requiere circular con cadenas por la presencia de nieve en los puertos de montaña de A Fontaneira (kilómetros 30-37) y O Cerredo (43-57) de la LU-530 (Lugo-A Fonsagrada); en la LU-701 en A Fonsagrada; LU-703 entre Barbeitos y límite con Asturias; LU-721 entre A Fonsagrada y Vilabol de Suarna; LU-740 entre A Fonsagrada y Vilardiaz y OU-122 entre Sobradelo y límite con Zamora (alto de Casaio).

Asimismo, el departamento de Infraestruturas aconseja circulación con precaución en una veintena de carreteras de las provincias de Lugo y Ourense por la presencia de nieve.

En lo que se refiere a las vías de alta capacidad, todas están abiertas y durante la noche se llevó a cabo la retirada de nieve y el esparcimiento de fundentes en la AG-53, entre los enlaces de Piñor y Dozón y el reparto de fundentes preventivo en las autovías AG-11 (Barbanza), AG-41 (O Salnés), AG-55 (A Coruña-Carballo) y AG-57 (Val Miñor). El consumo de fundentes durante la noche ha sido de 25 toneladas de sal, y casi 8.000 litros de salmuera y estuvieron trabajando seis equipos quitanieves.

QUITANIEVES

Un total de 37 equipos quitanieves trabajan en la retirada de nieve y esparcen material fundente en las cuatro provincias gallegas, según explica la Xunta, con un consumo de 298 toneladas de sal y casi 57.000 litros de salmuera desde la pasada noche.

Estos trabajos se enmarcan en el Plan de Viabilidad Invernal, operativo desde el 1 de noviembre de 2012 y hasta el 30 de abril de 2013, con el fin de garantizar las condiciones de seguridad viaria en los casi 5.500 kilómetros de carreteras de titularidad autonómica.

Con todo, la Xunta recomienda ante un temporal de nieve evitar viajar a menos que sea estrictamente necesario y extremar las precauciones.