La reserva de agua almacenada en los embalses peninsulares ha vuelto a subir, un 1,8%, gracias a las abundantes lluvias de los últimos días, y se sitúa en 25.276 hectómetros cúbicos, que representan el 46,7% de su capacidad total.

Según los últimos datos del Ministerio de Medio Ambiente, las precipitaciones han beneficiado sobre todo a la cuenca del Tajo, en cuyos embalses han entrado 571 hectómetros cúbicos de agua, y han aliviado también la situación en las cuencas del Segura y el Júcar, aunque éstas siguen con la situación más precaria y sus embalses están al 9,5 y al 12,5%, respectivamente.

Esa "recarga" de los embalses del Tajo ha repercutido también sobre los embalses de Entrepeñas y Buendía, de los que depende el trasvase de aguas a la Cuenca del Segura.

Tras las precipitaciones de los últimos días, estos embalses cuentan con 259 hectómetros cúbicos, diecinueve por encima de la "línea roja" por debajo de la cual la ley impide realizar esa transferencia de agua.

Las lluvias del mes de octubre, de 85,3 litros por metro cuadrado de media, han sido superiores a los registros históricos acumulados desde el año 1930 (de 68,8 litros por metro cuadrado), y durante la última semana han sido muy abundantes en toda la península, sobre todo en Cáceres, donde se recogieron 137,2 litros por metro cuadrado.

Esas precipitaciones han propiciado que durante los últimos quince días los embalses peninsulares hayan recuperado más de 3.500 hectómetros cúbicos de agua (el 6,5% de su capacidad).

Con estas cifras, el año hidrológico (del 1 de octubre al 30 de septiembre) ha comenzado con más agua almacenada que el pasado (cuando los embalses tenían el 41,7% de sus reservas), aunque la cifra es todavía inferior a la media de los últimos diez años (del 52,5% en los primeros días de noviembre).

La reserva de agua en los pantanos aumentó la semana pasada por segunda vez consecutiva, esta vez el 4,7%, hasta alcanzar los 24.091 hectómetros cúbicos y situar el total embalsado en el 45,2% de la capacidad total.