Los grupos políticos con presencia en el Parlamento de Extremadura (PP, PSOE e IU) han coincido en la necesidad de contar con una nueva Ley de Servicios Sociales para la región.

Los diputados Teresa Tortonda (PP), Isabel Gil Rosiña (PSOE) y Pedro Escobar (IU) han participado este jueves en una mesa redonda sobre servicios sociales de base, organizada en Mérida por el Colegio de Trabajadores Sociales de Badajoz.

La 'popular' Teresa Tortonda ha manifestado, en declaraciones previas a dicha participación, que es necesario "modificar" las leyes adaptándolas a la realidad social actual, algo en lo que está trabajando el Gobierno de Extremadura.

"En esa nueva situación hay que contar con esa renta básica que el Gobierno de Extremadura va a aprobar en breve en el Parlamento de Extremadura, contar también con la Ley de la Dependencia y hay que contar con todas y cada de las prestaciones que se están desarrollando exactamente igual que venían desarrollando", ha indicado.

La diputada ha insistido también en que los servicios sociales en la región se están prestando como "siempre se han prestado" y "sin ningún tipo de problema", y ha reiterado el "blindaje de todos y cada uno de los profesionales" de este servicio, que se une al hecho de que también se estén llevando a cabo "todas y cada una de las prestaciones".

Por esta razón, Tortonda ha trasladado un mensaje de tranquilidad a los trabajadores sociales, toda vez que "se está trabajando por parte del Gobierno para que esto se mantenga", aunque ha recordado el cambio político experimentado en la región, que representa "formas diferentes de llevar a cabo la ejecución de los servicios sociales".

En su opinión, el colectivo de los trabajadores de los servicios sociales de base ha sido "olvidado" y "maltratado institucionalmente" por el anterior gobierno, que "prometió mucho pero que no hizo nada".

PSOE:

La nueva ley es "necesaria"

Por su parte, la diputada socialista en el parlamento regional Isabel Gil Rosiña ha pedido al Gobierno de Extremadura que tienda la mano para que las fuerzas se encaminen a un "consenso" de cara a una futura Ley de Servicios Sociales de Base, que en estos momentos es "necesaria".

En opinión de Gil Rosiña, la actual no se corresponde ni con la realidad social, ni con las prestaciones que hoy hay articuladas en la red de servicios sociales, ni tampoco con el trabajo que desempeñan los trabajadores.

De esta manera, ha insistido en que el PSOE hará "lo posible" para acordar y consensuar en el Parlamento de Extremadura una "buena ley de servicios sociales", aunque, mientras tanto, Gil Rosiña ha reclamado que se "blinde" la red de servicios actuales, ya que entiende que los servicios sociales de base no pueden estar gestionados a través de una orden de subvención sino de convenios.

Igualmente, Rosiña ha valorado la actividad que realizan las ONG u organizaciones caritativas, aunque ha insistido en que no se puede dejar a la población "al albur de la caridad", ya que deben ser los poderes públicos los que garanticen la asistencia y la atención a los ciudadanos.

IU:

La ley "se ha quedado vieja"

El diputado de IU Pedro Escobar ha calificado a los servicios sociales como uno de los pilares básicos de la sociedad del Bienestar y ha considerado que la ley extremeña "necesita una puesta a punto" y redefinir el ámbito de sus servicios sociales, ya que "se ha quedado vieja".

En su opinión, hace falta una nueva Ley de Servicios Sociales que defina los ámbitos de actuación y que establezca una estructura que haga depender estos servicios de una consejería y no de que un ayuntamiento tenga "menor o mayor sensibilidad".

"El personal de servicios sociales tiene que depender de la correspondiente consejería, como el personal de los servicios educativos o el personal de los servicios sanitarios", ha indicado Escobar.

Los servicios sociales se están "desestructurando"

Por su parte, la presidenta del Colegio de Trabajadores Sociales de Badajoz, Carmen Núñez, ha indicado que los servicios sociales se están "desestructurando" a nivel político, legislativo y económico, en un tiempo en el que las necesidades de la sociedad son "mayores" y los recursos menos.

Así, ha asegurado que la población actual tiene más necesidades y más cargas, con una clase media que no había precisado de la atención de los servicios sociales de base y que ahora "llenan" los despachos.

Al mismo tiempo ha apuntado que lo que más le preocupa al colectivo de trabajadores sociales es la "universalización" del sistema, como pueden ser los sistemas de educación o de sanidad; a lo que ha añadido que la ciudadanía aún no se ha tomado "en serio" que los servicios sociales forman parte del Estado de Bienestar como un miembro "de pleno derecho".

"Los servicios sociales siempre han estado parcheándose, manteniéndose, pero en la cuerda floja, y ahora están sufriendo más que nadie los recortes y la inestabilidad del sistema", ha aseverado.

Igualmente han participado en la mesa redonda Ángela de la Montaña (CCOO) y Nereo Ramírez (UGT). La representante de CCOO ha instado al Gobierno de Extremadura a que garantice y asegure la red básica de servicios sociales de base como puerta de entrada al sistema de atención y protección, y más en la situación de crisis actual.

Al mismo tiempo ha mostrado su preocupación por el "giro" que ha dado el sistema de financiación, ya que se ha puesto sobre la mesa la financiación "suficiente" pero "no ha sido afortunado el cambio de modelo a subvención".

El representante de UGT, por su parte, ha acusado al Gobierno de Extremadura de "dejación de su responsabilidad de atender a la ciudadanía", ya que, como ha recordado, más de un año después de tomar posesión, la región se encuentra con que "no hay ni un borrador" de esa nueva Ley de Servicios Sociales que anunció Monago al inicio de la legislatura.

Para Ramírez, esta ley debería haber sido una de las prioridades del nuevo Ejecutivo regional y no dejarla al "arbitrio del debate político" en el Parlamento de Extremadura.