La comisión de Pesca del Parlamento Europeo (PE) ha dado este martes el visto bueno a una reforma drástica de la Política Pesquera Comunitaria (PPC), con el objetivo de poner fin a la sobrepesca y proteger el futuro de los recursos marinos.

Los diputados respaldaron un informe elaborado por la diputada socialista alemana Ulrike Rodust, que pide medidas para limitar la capacidad de la flota, reducir los descartes (capturas no deseadas) y garantizar unos niveles sostenibles de las reservas. Es la primera vez que la Eurocámara, institución con poder de codecisión en este ámbito junto con el Consejo (países de la Unión Europea), se pronuncia sobre la reforma pesquera.

Rodust valoró durante una conferencia de prensa al término de la votación los avances que implica el informe, entre los que destacó el objetivo de lograr una pesca sostenible en 2015 y de poner fin de manera progresiva a los descartes, hasta su total prohibición.

El texto respaldado aboga además por que los acuerdos pesqueros con terceros países garanticen que la pesca se va a limitar a reservas que no están sobreexplotadas y porque incluyan cláusulas de respeto de los derechos humanos.

El eurodiputado Raul Romeva (ICV) valoró que se hayan sentado "las bases de una pesca comunitaria sostenible" y consideró que "la senda iniciada este martes debería poner fin a una política pesquera destructiva y económicamente ineficiente, basada en la sobrepesca y en el mal uso del dinero público". Romeva señaló que el paso dado permite "creer que una reforma ambiciosa es posible."

Por su parte, la organización ecologista Greenpeace ha dicho en un comunicado que el texto respaldado puede ayudar a mejorar el nivel de las reservas pesqueras "e invertir décadas de pesca excesiva a manos de una flota desproporcionada".

Los Estados miembros ya le dieron el visto bueno "parcial" (a falta del voto del PE) a la reforma de la PPC el pasado junio, introduciendo cambios para rebajar el nivel de ambición de la propuesta original de la Comisión Europea y aplazar los objetivos para la recuperación de las existencias pesqueras, limitando así el impacto sobre el sector. Todavía queda pendiente el voto del pleno de la Eurocámara.

A este respecto, el Consejo de ministros europeos de Pesca ha comenzado este martes ha definir las líneas rojas de los países en la negociación de los Totales Admisibles de Capturas y Cuotas para 2013. Tras esta primera jornada, intentarán cerrar el acuerdo entre el miércoles y el jueves.

Según ha explicado el ministro español de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, la reunión se presentaba "muy difícil" para los intereses españoles, porque la Comisión Europea ha puesto sobre la mesa una propuesta que implica "fortísimas reducciones en las especies de más interés para el país".

Así, Bruselas ha planteado reducir un 32% la merluza del norte en caladeros como el Gran Sol, el rape un 20% en el norte y un 38% en agua ibéricas y el gallo un 20% en el norte y un 27% en el caladero ibérico. No obstante, el ministro se comprometió a tratar de lograr incrementos en todas las especies de interés para España.

Pese a la propuesta europea, fuentes diplomáticas apuntan a que España tratará de aumentar un 9% la cuota de merluza del norte, una de las de mayor valor para la flota española, porque "la situación biológica lo permite" y mantener las del rape y el gallo en los mismos niveles de 2012. Esta última reivindicación también la apoyan Portugal, Francia e Irlanda.

Por otro lado, Arias Cañete también defenderá un "ligero incremento" de la cuota del boquerón en el Golfo de Cádiz, una especie cuya cuota Bruselas pretende mantener.

La negociación de las cuotas comenzó en la tarde del martes, en una reunión a tres bandas entre cada uno de los Estados miembros, la Comisión y la presidencia, que este semestre ostenta Chipre. El ministro español, uno de los primeros, expuso en una "dura y larga" reunión la posición española, con informes científicos que avalaban sus argumentos. Tradicionalmente, los país con más peso en el sector, como España, Francia o Reino Unido, son los primeros en hacer sus propuestas.

Con motivo del Consejo de Pesca más importante del año, ecologistas y representantes del sector artesanal de España y otros países se manifestaron hoy a las puertas del edificio donde se reúnen los ministros, en defensa de una pesca más sostenible. "No hay futuro en la sobrepesca. Tenemos que pescar menos peces y hacerlo de manera responsable para proteger nuestro patrimonio y mantener unos mares saludables", dijo Luis Rodríguez, pescador artesanal miembro de Asoar-Armega.