Casi 250 vecinos se conocen, se saludan y se paran a hablar a diario en Sodeto, un pueblo de la provincia de Huesca. Una rutina que podría definir a innumerables pequeñas poblaciones de España. Pero algo hace diferente a esta localidad: 16 millones de euros llovieron en el sorteo de la pasada Navidad gracias a las participaciones repartidas por la Asociación de Amas de Casa local.

Euros que llegaron a manos de todos los vecinos, salvo al más exótico: un cineasta griego, que se enamoró de una mujer y del pueblo y ahora restaura una torre abandonada a escasos 8 kilómetros del nido de millones que fue Sodeto hace poco más de un año.

Ese fue uno de los motivos de su mala suerte. Las amas de casa "fueron puerta por puerta a vender participaciones, pero no llegaron a él porque no sabían que estaba restaurando esa torre", explica Rosa Pons, alcaldesa de Sodeto desde hace más de 20 años.

Pero, lejos de depresiones o envidias, Costis Mitsotakis lo tuvo claro desde el principio. "En cuanto me enteré (por la llamada de un amigo) bajé al centro del pueblo corriendo con la cámara. No pensé en nada más que en la alegría de la gente, que es contagiosa". Esa primera toma de contacto con los agraciados por el 58.268 fue el germen de un gran proyecto de Costis: un documental sobre el antes, el durante y el después del pueblo de Sodeto tras la lluvia de millones.

Un danés se interesó por su proyecto, se convirtió en su socio para producirlo y en Internet ya se puede ver un adelanto. Se estrenará en cines en la primavera de 2013, pero su Cannes particular, su puesta de largo oficial, será Sodeto. Allí se pasará por primera vez el documental –de entre 90 y 110 minutos–, que incluirá una cena de gala que grabará el cineasta y que editará en el metraje final de su obra.

Este proyecto de Costis (43 años) será un capítulo más en una vida que lo trajo de Grecia por amor hasta Sodeto. Llegó hace casi 9 años a Huesca, y conoció el pueblo porque allí vivía la abuela de su pareja, ya fallecida.

Su historia de amor no llegó a buen puerto, "aunque somos grandes amigos, y ahora mismo está conmigo en casa", explica por teléfono. Se ganó el cariño de la gente. Y tras el sorteo, los vecinos le demostraron "detalles a nivel personal y humanitarios" que asegura nunca va a revelar. Así contesta a la pregunta de si alguno de los habitantes le ofreció algo del premio que habían conseguido.

La regidora resume con humildad lo que ha sido el último año en el pueblo, por el que han pasado medios de EE UU (The New York Times le dedicó un amplio reportaje), Japón, Chile... "Ni coches de alta gama ni cosas raras. Sí que hemos aprobado licencias (40 en 10 meses) para arreglos en propiedades. Vivimos de la agricultura, y en este tiempo todo han sido inversiones productivas".

¿Caprichos? "Antes la gente iba a por el sofá que podía pagar, ahora, al que les gusta", explica Pons, que ilustra con una anécdota cómo respira el pueblo tras los millones del Gordo. "Uno de nuestros jóvenes atendió a un medio alemán cuando vino al pueblo, y les dijo: ‘No quiero un Jaguar, me voy a comprar un tractor’".

La alcaldesa tenía dos participaciones del 58.268. Lo que ganó con una de ellas se lo regaló a sus dos hijas.  Lo de la otra lo destinó a uno de sus terrenos. Sonríe y dice: "¿Y si nos cayera otro más?". Este año, la apuesta es el 90.179. Y sí, Costis ha comprado participaciones.

La historia de Sodeto, y en concreto de Costis, podría tener otra dimensión y no solo la del documental del propio cineasta griego.

Medios locales, citando a portales internacionales, se han hecho eco en los últimos días de un posible proyecto de Disney, una película que estaría centrada en la figura del único no ganador del Gordo en el pueblo en 2011. Como cara protagonista –en la gran pantalla– suena el actor Steve Carell. El argumento lo habría inspirado el artículo publicado hace casi un año en The New York Times.