La convivencia en los centros es compleja, pero no alarmante. Los problemas son reflejo de la sociedad, pero el clima es relativamente bueno. No se debe confundir acoso con casos puntuales de indisciplina.

¿Cuáles son los principales problemas de convivencia?

Sobre todo la falta de habilidades sociales y la mala conducta del alumno ante las exigencias de los profesores. Hay muchos chicos que están perdidos e intentan defenderse con una actitud rebelde.

¿Dependen los conflictos de la edad de los escolares?

Cuando hay acoso es porque una persona tiene miedo a algo. Los niños más pequeños no suelen tener demasiados problemas, la cosa empeora cuando el estudiante tiene pocos puntos de apoyo y busca víctimas débiles para destacar.

¿A quién corresponde tratar este tema?

El profesor tiene que saber adaptarse al alumnado, pero es una tarea de todos. Las familias tienen que estar más pendientes y no justificar los errores de sus hijos, y la Administración también debe poner más medios humanos y materiales.

¿Qué tipo de medidas serían más efectivas?

Hay que reducir las ratios en las aulas para poder detectar mejor los casos de conflictividad. También es necesario potenciar la figura de los orientadores sociales y brindar más atención tutorial con horarios y enfoques concretos.

Bio

Zaragozano, de 48 años, es el jefe de estudios del C.P. Zalfonada y miembro del secretariado del sindicato STEA.