La Consellería de Medio Rural apuesta por fijar unos "índices de referencia" para evitar la venta de leche por debajo de los costes de producción, circunstancia que denuncian los sindicatos agrarios gallegos y por la que los ganaderos secundaron una huelga de entrega a la industria de la medianoche del martes a la noche del miércoles.

A preguntas de los periodistas en rueda de prensa, la titular en funciones de este departamento autonómico ha destacado que no le "gustaría hablar de precios" en la tentativa de resolver la situación de este sector. Con todo, ha subrayado que "no se puede hablar de pactos de precios, pero tampoco de vender a pérdidas", un día después de que se retomase la recogida de leche en las granjas gallegas gracias al principio de acuerdo logrado entre las partes con la Xunta como mediadora.

Al respecto, Quintana ha asegurado que Medio Rural "sigue trabajando" y ha reconocido que hay "deberes que hacer" y que estos "están encima de la mesa". De hecho, ha recordado el compromiso anunciado durante el debate de investidura por el presidente electo, Alberto Núñez Feijóo, que es que su primera reunión después de tomar posesión este sábado será con los agentes del sector lácteo.

"Seguimos trabajando hasta el último minuto en las líneas en las que nos comprometimos. Todos estamos de acuerdo, desde la Administración a la industria, en que es necesario trabajar para incrementar el valor de un producto tan importante para la estructura social y económica de Galicia como es la leche", ha remarcado la conselleira en funciones.

Sancionar prácticas ilegales

Después de agradecer "el voto de confianza" de las organizaciones agrarias, que advierten de que si no hay avances en los próximos días retomarán las movilizaciones, Rosa Quintana ha abogado por la búsqueda de índices de referencia —en función de los costes de producción y de la abundancia del producto en cada campaña— y por los programas de control —como el que la Xunta puso en marcha en septiembre en coordinación con el Ministerio de Agricultura— como solución a los bajos precios que reciben las granjas en Galicia en comparación con la media estatal.

Sobre esta última vía, la de las inspecciones para acabar con posibles prácticas ilegales, ha asegurado que hay actas y "expedientes tramitándose".

Por último, ha valorado el "esfuerzo" del ministerio y ha confiado en que los pasos que adopte en materia legislativa sirvan también para normalizar la situación del sector gallego.