El portavoz del PNV en las Juntas Generales de Gipuzkoa, Markel Olano, ha asegurado que su partido tiene previsto presentar, tanto enmiendas parciales como una enmienda a la totalidad del proyecto de Presupuestos de Gipuzkoa, y ha anunciado un claro "marcaje" de los jeltzales al Gobierno de Bildu.

En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, Olano ha manifestado que su partido ya ha mantenido contactos para intentar negociar las Cuentas de 2013, y ya ha transmitido a la coalición soberanista que sus tesis "van a ser prácticamente las mismas este año, pero reforzadas por la necesidad de poner en marcha un planteamiento de apoyo a la empresa".

Tras advertir de que la sociedad no comprenderá que Bildu haya rehusado a aceptar el pacto global ofrecido por el PNV para sacar adelante los presupuestos en todas las instituciones, ha asegurado que, en la actual coyuntura, los jeltzales reclaman una estrategia, en Gipuzkoa, para hacer frente a la crisis económica.

Además, se ha mostrado convencido de que lo que considera incumplimiento de Bildu de los acuerdos a cambio de su abstención para posibilitar la aprobación de los presupuestos vigentes estará "en la cazuela o en el cocido", porque el PNV lo introducirá "como elemento de reflexión, junto a una consideración más general".

"dinámica diferente"

En su opinión, en el territorio se ha generado "una dinámica muy negativa en diferentes ámbitos", entre ellos, la recogida de residuos, el "enfoque" de la financiación de las carreteras así como en otros asuntos económicos.

Ha advertido de que, "en todos ellos", el PNV tendrá "una posición muy clara de marcaje al Gobierno de Bildu", que se traducirá en "un planteamiento de enmiendas y también de enmiendas a la totalidad" al proyectos de Cuentas que ha presentado el Gobierno foral.

Para el portavoz de PNV ha acusado a la coalición soberanista de hacer desaparecer "toda su retórica de participación de apertura, de democracia, de dar la palabra al pueblo" al acceder al Ejecutivo foral.

En su opinión, lo que hace es "imponer una mayoría", algo "legítimo, en democracia", pero que "desde el punto de vista de una institución, es un paso atrás muy importante" respecto al "liderazgo compartido" que, en su opinión, aplicaron los jeltzales cuando lideraban el Ejecutivo de la institución foral.