Cáritas Diocesana de Cuenca ha atendido desde enero a octubre de este año un total de 769 personas en su Centro de Baja Exigencia, un centro en el que se presta atención básica como servicio de ducha, comedor, alojamiento o lavandería.

Así lo ha asegurado este jueves Óscar San Julián, trabajador social de Cáritas en Cuenca, quien ha destacado que el perfil de las personas atendidas no ha variado en los últimos meses. "Del total de personas atendidas, más de 75 por ciento son de nacionalidad española, y el resto, extranjera, la mayoría procedentes de Rumanía, Portugal y Marruecos. Si atendemos al sexo, el 92 por ciento son hombres, y la edad oscila entre los 45 y los 65 años".

Son datos que han dado a conocer con motivo de la Campaña de Personas sin Hogar que Cáritas de Castilla-La Mancha celebrará el próximo domingo, día 25 de noviembre, bajo el lema 'Son derechos, no regalos. Nadie sin hogar' y que este año cumple 20 años.

Tal y como ha señalado el director del Cáritas Diocesana en Cuenca, Silvestre Valero, "el objetivo de esta campaña es sensibilizar sobre la precariedad a la que se enfrentan las personas sin hogar a la hora de acceder al derecho de la protección social".

Esta campaña no sólo se dirige a la ciudadanía en general, sino también las Administraciones Públicas con la intención de que incrementen el esfuerzo en protección social y garanticen los ingresos mínimos con la participación de las Comunidades Autónomas.

En este sentido, Valero ha recordado que la Junta de Comunidades tiene una deuda con Cáritas de Castilla-La Mancha de 6 millones de euros por los diferentes convenios firmados con el Gobierno Regional para la prestación de servicios.

"Esta deuda reduce nuestras posibilidades de atención a las personas más necesitadas. Estamos atravesando una situación muy difícil, pero estamos consiguiendo salir adelante gracias a la voluntad de muchos ciudadanos", ha señalado.