David Tejera, XLIV Premio de Novela Ateneo de Sevilla con su obra 'Seis peces azules', publicada por Algaida Editores, rinde homenaje "a los que se juegan el pellejo por perseguir la felicidad" y muestra su admiración "por los que aprenden a ser felices disfrutando y valorando las pequeñas cosas que nos regala la vida".

Con estas palabras, el escritor y periodista madrileño define su novela presentada a este galardón, dotado con 24.000 euros, bajo el seudónimo de 'Los peces de colores'. "Es la vida que me inventé para un hombre al que conocí en la India hace 12 años. Y también la de un puñado de personajes conectados con él y con su destino de una forma o de otra", explica.

"En el fondo, todos persiguen el tesoro más valioso, todos afrontan la aventura más apasionante que es vivir. En ella es fácil perder de vista que estamos de paso y que tenemos la obligación de intentar ser felices. Eso en un mundo como el que estamos, con tanta crisis, tantas cosas, tanto mal rollo debería hacernos pensar, mirar un poco más hacia dentro y si hace falta... tomar decisiones valientes", prosigue.

Una historia en torno a che guevara

Por su parte, el sevillano Fernando Otero, ganador del XVII Premio Ateneo Joven con su novela 'Donde la muerte se encuentre', teje su historia con Che Guevara como protagonista. La novela versa sobre el mítico guerrillero, quien en octubre de 1967 sobrevive a duras penas junto a sus compañeros ante el cerco del ejército boliviano.

Tras su captura y ejecución, surgen rumores que desmienten la versión oficial sobre el transitar de la guerrilla. La desaparición de documentos y el mutismo de los testigos presenciales y del Gobierno cubano aumentan los rumores sobre la traición al Che.

Cuarenta años más tarde, el joven investigador español Ginés Maldonado, cargado de valentía y admiración por Guevara, viaja a Cuba como estoque final a su tesis doctoral sobre la muerte del guerrillero. Durante sus pesquisas añora a la mujer que ha abandonado en España y encuentra obstáculos insospechables interpuestos por los Servicios de Inteligencia de la isla. A pesar de todo, su audacia y convicción le conducen hasta un exguerrillero compañero del Che, un diario de guerrilla nunca publicado y, sobre todo, Neliza Valdés, la persona que esconde los enigmas más inconfesables sobre la muerte del revolucionario.