Los funcionarios europeos hacen huelga contra posibles recortes salariales previstos por la UE

  • El 95% de los del Consejo de la UE y el 60% de los de la Comisión secundaron este jueves la huelga, según los sindicatos.
  • Bruselas reduce al 10% el seguimiento del parón de estos empleados públicos
  • Protestan contra posibles recortes salariales que es estudian para 2014-2020.
Vista general del hemiciclo del Parlamento Europeo durante una sesión plenaria, en la sede de Estrasburgo
Vista general del hemiciclo del Parlamento Europeo durante una sesión plenaria, en la sede de Estrasburgo
Christophe Karaba / EFE
Vista general del hemiciclo del Parlamento Europeo durante una sesión plenaria, en la sede de Estrasburgo

Los funcionarios europeos del Consejo de la Unión Europea y de la Comisión Europea han secundado la huelga convocada este jueves por los sindicatos de la función pública europea para protestar por los posibles recortes en sus sueldos en el marco de las reducciones previstas para el próximo presupuesto europeo que están negociando en la actualidad los Veintisiete y que cubre el periodo 2014-2020.

Alrededor del 95% de los funcionarios del Consejo de la UE y el 60% de los funcionarios de la Comisión Europea han secundado la huelga convocada por los sindicatos de la Federación Europea de la Función Pública (FFPE), la Unión Sindical del Consejo de la UE y el Consejo de Renovación Democrática, que representan a los trabajadores del Consejo de la UE, según datos ofrecidos por los propios sindicatos.

Unas 55.000 personas trabajan en las distintas instituciones europeas, según datos del Ejecutivo comunitario.

La Comisión Europea ha rebajado por su parte al 10% el seguimiento de la huelga entre sus trabajadores en el caso de algunos departamentos, mientras que en otros el seguimiento ha sido nulo, según explicó el portavoz de Administración del Ejecutivo comunitario, Antony Gravili.

Apoyo de los cuatro sindicatos mayoritarios

La huelga ha tenido menor seguimiento entre el personal de la Comisión Europea porque no fue apoyada por todos los sindicatos que representan a sus trabajadores, aunque sí por los cuatro mayoritarios  —TAO, USF, Solidaridad Europea Bruselas y Generación 2004— pero no se han sumado R&D y U4U, según ha explicado fuentes sindicales.

Unos 1.000 funcionarios europeos, sobre todo de la Comisión Europea, se han manifestado además al mediodía frente a la sede del Ejecutivo comunitario en Bruselas en señal de solidaridad con los funcionarios que han secundado la huelga con pancartas con lemas que rezaban Sin servicio público europeo no hay futuro para Europa, Europa está en peligro o Una Comisión fuerte para un Europa fuerte.

Además, los servicios de traducción de la conferencia diaria de la Comisión Europea no han funcionado este jueves.

"Los recortes presupuestarios previstos para el gasto administrativo son tales que las instituciones ya no podrían ser capaces de cumplir con sus responsabilidades de acuerdo con los Tratados", han justificado los sindicatos en un comunicado.

Los sindicatos justifican la huelga tras recordar que los funcionarios públicos europeos ya sufrieron una merma salarial de entre el 5 y 25% en el marco de la reforma lanzada en mayo de 2004 y que desde entonces su poder adquisitivo se ha reducido un 7,6%, mientras que el de los funcionarios de los Veintisiete ha caído de media un 3,6%.

La reforma, que también rebajó un 5% las pensiones de los funcionarios europeos, ha generado un ahorro para las arcas comunitarias de 3.000 millones de euros desde 2004 y permitirá un ahorro adicional de 5.000 millones más entre 2014 y 2020, según estimaciones de los sindicatos.

Nuevos recortes

La Comisión Europea propuso el año pasado nuevos recortes del 5% del personal, aumentar las horas semanales de trabajo de los funcionarios hasta las 40 horas y elevar la edad de jubilación de los funcionarios hasta los 65 años con el objetivo de ahorrar otros 1.000 millones de euros entre 2014 y 2020.

"Los ahorros propuestos se obtendrían esencialmente vía cambios estructurales y casi de forma exclusiva a expensas del personal de las instituciones europeas con los salarios más bajos", denuncian los sindicatos europeos de la función pública.

El presidente de la FFPE, Renzo Carpetino, ha criticado que en el marco de las negociaciones del próximo presupuesto multianual europeo para 2014-2020 la Presidencia chipriota de la UE ha propuesto reducir "en un 25% el personal de todas las instituciones" europeas.

Y que, además, algunos Estados miembros como Reino Unido, Alemania, Países Bajos y Finlandia piden ir más lejos y reducir "el 40%" de la plantilla total. "Quieren destruir la función pública europea. Al final no habrá funcionarios europeos", ha denunciado.

"No buscamos mantener privilegios que no tenemos"

Carpetino ha criticado además los nuevos posibles recortes contemplados de los funcionarios europeos "especialmente de los secretarios de alrededor del 22%", mientras que el representante de USF y funcionario de la Comisión Europea José Bellod ha asegurado que éstos "pueden llegar hasta el 30% o el 50% del suelo de buena parte de los funcionarios" y ha recordado que en países como Luxemburgo es difícil reclutar al personal necesario porque los sueldos ya están por debajo del "mínimo" de este país.

"Nadie está pidiendo ahora más sueldo. Somos tremendamente conscientes de la crisis", ha recalcado Bellod, que ha recordado que los salarios de los funcionarios bajan o suben "absolutamente en línea con lo que ocurre en la función pública nacional" a partir de una media ponderada de los salarios de varios países de la UE.

"No buscamos mantener privilegios que no tenemos. Simplemente que esos salarios sigan evolucionando en función de lo que ocurre en la función pública europea", ha insistido.

La Comisión Europea deja claro que por su parte "no ha propuesto (nuevos) recortes salariales" para los funcionarios europeos —que van desde el mínimo de 2.600 euros al mes hasta los 16.900 de máximo, dependiendo del rango— porque "hay que equilibrar la necesidad de recortar y seguir atrayendo a los más inteligentes y mejores de todos los Estados miembros" para trabajar en las instituciones comunitarias.

"Ya hay mucha dificultad para atraer a gente de los países ricos como Reino Unido, Francia, Alemania y Países Bajos", ha explicado Gravili.

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