La Fundación Picasso-Museo Casa Natal ha ampliado el contenido de sus fondos y el espacio dedicados a situar al artista en su contexto originario. Así, la exposición permanente de la plaza de la Merced ha incorporado nuevas piezas y elementos que dan testimonio de la época que vivió en la ciudad.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, acompañado por el concejal de Cultura, Damián Caneda, y por el director de la Fundación Picasso-Museo Casa Natal, José María Luna, han presentado este viernes el nuevo contenido expositivo, que ocupa la primera planta de la Casa Natal y se distribuye en seis salas.

Entre otras piezas pueden encontrarse documentos oficiales —partida bautismal o exámenes—, vestuario, complementos, joyas, piezas de ajuar, fotografías, pinturas o mobiliario.

En concreto, la sala 1 es una recreación de un ambiente doméstico del siglo XIX; la 2 está dedicada a los padres de Picasso; la 3 se denomina 'La familia de Picasso'; la 4, 'la Málaga de Picasso'; la 5, 'Picasso de Málaga', y la 6, 'Picasso y España'.

Con esta actuación, la Fundación Picasso quiere proporcionar al público un mayor acercamiento a la vida del artista en su ciudad natal. Así, son piezas que permiten testimoniar y contextualizar a la familia Picasso con este inmueble y con la Málaga de su época.

Se trata de un fondo histórico cedido por coleccionistas particulares e instituciones oficiales. Ha sido posibles gracias a la colaboración de José Lozano Márquez, Fernando Juan Sánchez Ferreira y Ralf Pirlz, que han aportado obras del padre de Picasso; y a José Manuel Cabra de Luna y Marcos Seseña, por la donación de mobiliario isabelino y la réplica de la capa española que le fue regalada al artista, respectivamente.

Desamparos Quiles Faz y una coleccionista privada de Torremolinos han prestado elementos representativos del siglo XIX y Juan Barco Caballero ha aportado dos barros malagueños.

Igualmente, han colaborado en esta muestra el Obispado de Málaga, con la partida de nacimiento de Picasso; el instituto Nuestra Señora de la Victoria de Málaga, con su examen de ingreso en el Instituto de Segunda Enseñanza, y el Archivo Municipal de Málaga, que ha realizado el préstamo de 17 elementos.

CONTENIDO

Entre la nueva oferta expositiva permanente, en la sala 3 se encuentra el acta de bautismo del pintor. Fotografías de la familia Picasso testimonian los comienzos de ese niño al que pusieron los nombres de Pablo, Diego, José, Francisco de Paula, Juan Nepomuceno, María de los Remedios y Cipriano de la Santísima Trinidad.

En la sala 4 se pueden encontrar tres óleos firmados por José Ruiz Blasco, padre del artista, así como documentos históricos aportados por el Archivo Municipal de Málaga que atestiguan la situación de la época como postales, carteles, fotografías, revistas, etcétera. También pueden encontrarse objetos cotidianos extraídos de colecciones particulares: un bastón, binoculares de teatro, un sombrero de copa o un abanico.

En la sala 5 se encuentra el que sería el último examen que el artista realizó en su ciudad natal, el 25 de junio de 1891, en el Instituto de Segunda Enseñanza de Málaga, en la calle Gaona. Hoy se encuentra custodiado en el instituto Santa María de la Victoria de Málaga (Martiricos), desde donde se ha permitido su cesión temporal.

También se ofrece el censo de la ciudad de 1885, así como estampas que representan la fascinación de Picasso por el mar, especialmente por el Mediterráneo, que le llevó a rememorar en sus obras las costas de su niñez y de su juventud españolas.

Gracias a esa fascinación del artista, el visitante es testigo de grandes acontecimientos que acaecieron en la ciudad de Málaga, como el naufragio de la corbeta alemana Gneisenau, a través de documentos fotográficos e históricos, así como por la reproducción —cedida y autorizada por el Museo Picasso de Barcelona— de un dibujo a carboncillo de Picasso que recoge la escena del naufragio.

En la sala 6 se evoca la afición por lo taurino y el flamenco del artista. Así, puede verse la única réplica de la capa española —cedida por Capas Seseña— que el torero Luis Miguel Dominguín regaló al artista; una prenda predilecta de Picasso hasta tal punto que, al fallecer, el 8 de abril de 1973, su viuda, Jacqueline Roque, decidió que le acompañara por siempre.

En la misma sala el visitante podrá observar una fotografía en la que el artista porta la citada capa, publicada por la revista 'Life' y realizada por el fotógrafo David Douglas Duncan. Litografías, cerámicas o fotografías completan el material de este espacio, junto a dos barros malagueños taurinos del siglo XIX.