La consejera de Presidencia y Justicia, Leticia Díaz, ha recibido a distintas ONGs de Cantabria que trabajan en el ámbito de la trata de personas, con motivo de la celebración del Día Europeo contra la Trata de Personas. Leticia Díaz ha expresado su "más enérgico rechazo" y su condena a este tipo de delitos que "vulneran los derechos más fundamentales de las víctimas y reducen al ser humano a la categoría de mercancía".

Las organizaciones no gubernamentales que han mantenido el encuentro con Leticia Díaz son la Fundación Igenus, Cáritas Diocesana de Cantabria, Nueva Vida Cantabria y la Red Cántabra contra la Trata de Personas, las cuales han trasmitido a la consejera sus principales actuaciones y su contribución en la lucha contra esta lacra.

En ese sentido, la consejera ha pedido a los asistentes que elaboren sendas memorias de su trabajo y sus actividades en este ámbito para, una vez unido con la memoria de actividad de las direcciones generales de Justicia y de Igualdad, Mujer y Juventud, elaborar una guía de recursos que haga más sencilla la colaboración, en pos de "caminar en una misma dirección" y tratar de "mitigar" este problema.

En el encuentro también han estado presentes el delegado del Gobierno, Samuel Ruiz; la directora general de Mujer, Igualdad y Justicia, Isabel Gómez-Barreda; el director general de Justicia, Ángel Santiago; el coronel jefe de la Guardia Civil en Cantabria, Justo Chamorro; el Jefe Superior de Policía en Cantabria, Javier Peña, y el Jefe de la Brigada de Extranjería, José Luis Casquero.

Durante la reunión, Leticia Díaz ha presentado a los asistentes la campaña 'Corazón Azul' a la que el Gobierno de Cantabria se une y que representa "la tristeza de quienes son víctimas de la trata de personas" y recuerda "la insensibilidad de quienes compran y venden a otros seres humanos".

Colaboración institucional

Las asociaciones representadas en la reunión trabajan en diversos proyectos de información, orientación y asesoramiento a las mujeres autóctonas e inmigrantes víctimas de delitos contra la libertad sexual y de tráfico con fines de explotación sexual, facilitando su inserción sociolaboral.

Muchos de ellos se desarrollan en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en clubes y pisos, mediante la disposición de unidades móviles que permiten la información, detección e identificación de casos de trata o tráfico de seres humanos y de explotación sexual, abusos y atención a menores víctimas, según informa el Gobierno regional en un comunicado.

La consejera de Presidencia ha señalado que este tipo de actividades delictivas "privan de dignidad a quiénes lo padecen" y ha destacado "la colaboración institucional" como pilar fundamental para luchar contra este tipo de actividades delictivas.

En España la trata de seres humanos se vincula especialmente a la inmigración y afecta principalmente a las mujeres. La mayor parte de las víctimas son mujeres de entre 18 y 25 años que han sido captadas en sus lugares de origen por personas, grupos de delincuentes o redes criminales organizadas.