"El presente informe pretende desenmascarar al 'heróe', quién se convirtió en tal, por una errónea o malintencionada interpretación de sus actuaciones". Este párrafo es uno de los muchos que nutren el informe que el Sindicato Profesional de la Policía (que solo aglutina a lo mandos) va a enviar a la Fiscalía de Madrid solicitando que actúe contra el ya famoso Alberto Casillas Asenjo, el dueño del bar Prado, situado en el paseo madrileño del mismo nombre, cuyas imágenes plantado en la puerta del local con las manos en alto el 25-S se propagaron rápidamente por televisiones y redes sociales.

El SPP y el jefe de la unidad de antidisturbios que el 25-S actuaron frente al bar de Asenjo le acusan de "teatrero" y también preparan sendas querellas por injurias y calumnias contra él. Pero hay más frentes abiertos. El pasado día 10 de octubre, el SPP pidió en el Consejo de la Policía que la dirección del Cuerpo también emprenda acciones legales contra él. Los equipos jurídicos de la Policía ya han remitido a la abogacía del Estado las imágenes de los incidentes de esa noche y las intervenciones de Alberto Casillas en programas de televisión por sin son constitutivas de delito.

El informe policial, al que ha tenido acceso 20 minutos, pretende desmentir una a una las acusaciones que Casillas hizo contra la Policía en varios medios escritos y canales de televisión. El SPP ha entregado varios vídeos que según el sindicato contradicen las acusaciones posteriores de Alberto Casillas, que también protagonizó más incidentes con los antidisturbios cuatro días después, el 29-S.

La Policía asegura que el 25-S ningún agente intentó entrar en el bar Prado, y que lo único que hizo un grupo de 15 antidisturbios fue reagruparse frente al local para protegerse de la lluvia de objetos que les estaban cayendo. Fue entonces cuando Alberto Casillas ya había salido a la puerta y con los brazos abiertos gritaba a los manifestantes "no tiréis piedras".

El jefe de la unidad de antidisturbios explica que en ese momento le pidieron "al héroe" del 25-S que se retirara al interior de su bar para que ningún objeto le alcanzara e hiriera. El informe incluye un vídeo de tres minutos para avalar la explicación de los agentes: que estuvieron frente al local de Casillas solo dos minutos y medios y que luego se fueron sin intentar entrar en el bar en ningún momento.

Cuatro días después, las protestas ciudadanas se repitieron en el paseo del Prado y Casillas volvió a ser protagonista. Denunció que un agente le agredió, aunque luego matizó que retiraba la denuncia. Durante el incidente, Casillas aparece en el suelo desmayado y luego contó en Telecinco que le habían agredido y empujado.

La Policía presenta en este punto otro vídeo en el que quiere dejar claro que nadie empujó o golpeó a Casillas y que cuando se desmaya en el suelo los agentes avisan al Samur para que acudan a ayudarle. "El señor Casillas ha difamado la labor del Cuerpo Nacional de Policía, al manifestar públicamente, a través de un medio televisivo que dicho Cuerpo es 'peor que la de Franco'".

Por último, el informe destaca que Casillas reveló en varios programas el número de carné profesional de un agente que, sin embargo, no coincidía con el que sí le facilitó el inspector que denunció al dueño del bar por alterar el orden público.