El impacto en los hogares españoles de la subida de IVA que entró en vigor el pasado mes de septiembre oscilará entre los 94,9 y los 1.370 euros al año, según una estimación de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas). La subida, añaden, generará de media un aumento de impuestos indirectos de 356,8 euros al año, lo que supone un incremento del 10,13%.

En cuanto a la recaudación, será de unos 6.700 millones de euros al año, de los que 5.010,5 millones vendrían de los hogares y el resto de otros agentes económicos como las administraciones públicas y el sector empresarial público y privado.

Son las conclusiones de un artículo firmado por los economistas José Félix Sanz y Desiderio Romero, director e investigador adscrito de la Dirección de Estudios Tributarios de Funcas, y publicado en el último número de Cuadernos de Información Económica.

El texto analiza los efectos recaudatorios de la reforma del IVA y la recaudación tributaria en tiempos de crisis y considera "proporcional" la medida del Gobierno. "Se puede afirmar, contrariamente a la percepción generalizada, que la subida aprobada en el IVA no es especialmente regresiva", explican los autores, explicando que combina con la forma concreta en que se distribuye el gasto en España.

Las estimaciones sobre recaudación tienen en cuenta el impacto de los cambios impositivos en las decisiones de consumo de los hogares para evitar resultados sesgados al alza. Si el cambio fiscal no alterara las decisiones de consumo haciendo que se consuman más unos bienes que otros, la recaudación total se elevaría a 7.445,6 millones, ya que los hogares aportarían 573,7 millones más, hasta 5.584,2 millones.

Así, se deduce que si no se tiene en cuenta el impacto en el consumo se genera una sobreestimación de 845 millones, que es lo que, según Funcas, ha ocurrido con algunas cifras oficiales publicadas recientemente.

De hecho, la fundación advierte de que las cifras de recaudación podrían ser incluso menores si hay cambios significativos que afecten a la renta disponible de los consumidores como el salario medio, la tasa de paro, la tasa de ahorro o las expectativas de los agentes económicos.

Las ganancias recaudatorias del cambio fiscal se podían dedicar a reducir el elevado déficit o a generar una devaluación fiscal para financiar una reducción de las cotizaciones sociales, aunque ambas opciones, según Funcas, se encuentran con el inconveniente de la subida del IRPF que acometió el Ejecutivo.

Sin revisar previamente la "fuerte elevación" de los tipos marginales, la subida de IVA se encuentra "francamente limitada", señala la fundación, tras recordar que los ingresos de este tributo cayeron un 7,2% en el primer cuatrimestre de 2012 por la crisis y por la subida de IRPF.

Por otro lado, la fundación se refiere a la amnistía fiscal puesta en marcha por el Gobierno para recaudar 2.500 millones, y advierte de que el cumplimiento de estas previsiones es "fundamental" para alcanzar el objetivo de déficit público en 2013 a pesar de la poca recaudación registrada en los primeros meses (52 millones).

Funcas repasa los beneficios y costes que supone adoptar estas medidas y concluye que la mayor parte de las amnistías generan ingresos de escasa cuantía, por lo que su contribución a la reducción de los equilibrios presupuestarios es "muy limitada". Además, señala que un "factor determinante" para su éxito reside en la credibilidad del Gobierno.