La sanidad pública madrileña sigue siendo "deficiente", según el informe comparativo 'Los servicios sanitarios de las Comunidades Autónomas', que publica desde 2004 la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP). El grado de satisfacción de los madrileños no cambia con respecto a 2011 (6,64), pero disminuye el porcentaje de usuarios que logran una cita con su médico de cabecera en las 24 horas posteriores a solicitarla.

Solo 52.514 madrileños han cambiado de médicoSi un 45% de la población aseguraba en 2011 que "siempre o casi siempre" consigue pasar por la consulta en ese plazo, en el estudio correspondiente a 2012 ese dato baja hasta el 38,5%. Un descontento con el ambulatorio y el médico de familia que ya evidenciaba la tercera encuesta de satisfacción realizada en 2011 por la propia Consejería de Sanidad. En ella, la complacencia de los vecinos con el ambulatorio del barrio descendía dos puntos respecto a 2009, quedándose en el 84%, frente al 86% que llegó a alcanzar. Y la Comunidad explicaba el motivo: la dificultad para citarse con el médico de familia.

Estos resultados cuestionan la efectividad de la Ley de Libre Elección de Médico y el área única sanitaria, que acaba de cumplir dos años y de la que —según los datos oficiales y cerrados del primer año— solo habrían hecho uso 52.514 madrileños, eligiendo un centro de salud diferente al que les correspondía.

Por su parte, los pacientes tienen su propia explicación al colapso, que achacan al sistema de citaciones. Concretamente al servicio telefónico automático que se inauguró hace también dos años y que no todos las personas saben utilizar, especialmente los ancianos, tal y como publicó en julio 20 minutos. De hecho, la Consejería de Sanidad reconoce que el 80% de las citas se siguen solicitando en ventanilla, es decir, desplazándose al centro de salud.

El colapso de los ambulatorios —al que se suman los 200.000 madrileños que desde que empezó la crisis en 2008 han dado de baja su póliza médica privada volviendo a la pública— no se refleja por el momento en los especialistas, que mejoran. Si en 2011 un 18% de los pacientes conseguían cita en las consultas hospitalarias en el plazo de 15 días, en 2012 este porcentaje ha subido al 26,6%, según el informe de la FADSP.

Y la encuesta oficial de satisfacción también lo corroboraba así. En los datos de Sanidad, los hospitales y sus consultas subían dos puntos en la valoración de los usuarios, del 84,4 al 86,5%, justo el mismo porcentaje —dos puntos— que se perdía en la Atención Primaria.

Aunque las consultas hospitalarias están bien valoradas, no todas convencen igual y los usuarios destacan unas por encima de otras. El Gregorio Marañón es el hospital que gana por goleada y que en solo un año aglutinó 16.000 peticiones de madrileños para ser atendidos por sus especialistas o intervenidos por ellos. El segundo en el ranking de favoritos es el Clínico San Carlos —que solicitaron más de 13.250 pacientes—, y La Paz cierra el trío de hospitales mejor valorados y más solicitados por los vecinos de la región con 10.244 solicitudes de libre elección .

Los que no figuran en la clasificación de preferidos son los nuevos hospitales construidos e inaugurados en la era Aguirre, como el de Valdemoro, Vallecas o Parla.

Los resultados del informe confirman que hay una relación casi directa entre el gasto sanitario per cápita y los resultados obtenidos por el sistema sanitario. Los mejores servicios sanitarios están en las comunidades que más invierten en esta cartera: Asturias (1.530,90 euros), Navarra (1.424,51), País Vasco (1.557,78) y Aragón (1.371,87). Madrid se gasta por ciudadano 1.104,52 euros. Murcia, Canarias y la Comunidad Valenciana, que completan el vagón de cola, gastan 1.219,89 euros, 1.161,97 y 974,82, respectivamente por paciente.