En ramadán... el ‘sawm’

El 65% de los 1.500 musulmanes que viven en Valladolid llevan tres días cumpliendo con el rito del ayuno (‘sawm’) durante las horas de sol.
Bassir, Abdou y Dabo. Senegaleses. (Fernando Blanco).
Bassir, Abdou y Dabo. Senegaleses. (Fernando Blanco).
Bassir, Abdou y Dabo. Senegaleses. (Fernando Blanco).
30 días sin comer ni beber ni fumar ni practicar sexo... pero 30 días, no hablamos de las noches.Alrededor del 65% de los 1.500 musulmanes que viven en Valladolid llevan ya desde el 23 de septiembre cumpliendo lo que todos conocemos como ramadán, el mes en el que tienen que guardar el ayuno (sawm). Tan sólo los enfermos, las embarazadas y otros casos excepcionales están dispensados, por motivos de salud.

Para llevarse algo a la boca hay que esperar a que se oculte el Sol; eso sí, es motivo de fiesta, de reunión con amigos ante productos tradicionales que no se suelen cocinar durante el resto del año y que comienzan a preparar meses antes de que lleguen estas fechas.

Buenos pensamientos

El ramadán no es sólo aguantar con el estómago vacío, también cuentan los pensamientos y las actitudes. «Hay que tener una buena conducta, porque de nada serviría ayunar y tener malos pensamientos o mentir y hacer el mal. Se trata de no reñir y evitar los conflictos», dice el imán de Valladolid, Zaki Zayed.

Aunque la mezquita en la que reza la comunidad musulmana en la calle Faisán se les está quedando pequeña, los rezos cinco veces al día se mantienen e incluso se intensifican durante los últimos días del ayuno. Es en ese momento cuando llega la noche del destino, el momento en el que al profeta Mahoma se le comenzaron a revelar los primeros versos del Corán, y cuando los que practican la religión del islam aumentan sus plegarias y rezos.

El próximo 23 de octubre, los musulmanes volverán a comer y beber, algunos hasta a fumar y los más afortunados practicarán sexo, eso sí, incluso de día.

Por la noche... se levanta la abstinencia

Bassir, Abdou y Dabo. Senegaleses

«A todo se acostumbra uno»

Viven en el centro y saben perfectamente, desde cualquier habitación de su casa, en qué dirección se encuentra la Meca. «Rezamos juntos, aunque por el trabajo no siempre podemos ir a la mezquita y hacemos las oraciones en casa», dice Bassir. «Siempre cumplimos, pero se echa de menos a la familia en estas fechas», asegura Abdou. Dabo es más silencioso, pero asiente cuando los otros dicen que «lo más difícil es lo de las relaciones sexuales, sólo se puede si eres casado, con la novia no vale». «Comenzamos con el ayuno a los diez años y a todo se acostumbra uno», «eso sí, por la noche, pollo, zumo y lo que se pueda».

5 preguntas a...

Zaki Zayed Mahmoud. Imán de Valladolid

1¿El ramadán es ayuno?

No, es el mes nueve. El hecho de ayunar se llama sawm y hay que cumplirlo como uno de los cinco pilares del islam.

2¿Cuáles son esos pilares?

Creer en Dios y que Mahoma es su mensajero. Rezar cinco veces al día. Hay  impuestos que pagan los ricos a los pobres. El ayuno y la peregrinación a la Meca.

3Cuando se esconde el Sol, ¿se dan alguna alegría?

Se comen alimentos tradicionales. Es como aquí la Navidad y el turrón. Se invita a amigos y se hace una fiesta.

4¿Qué hace un imán?

Estos días se intensifican las clases sobre los buenos hechos. Es la figura que representa a la comunidad.

5¿No les importa rezar en una cochera?

Importa la intención. Tenemos pocas posibilidades, pero estamos buscando un sitio nuevo.

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