Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Gijón están tratando de localizar a dos hombres de nacionalidad extranjera y que presentan documentación irlandesa, a los que se acusa de tratar de vender dos pulseras supuestamente de oro, según una nota de la Comisaría gijonesa.
Fueron los encargados de una de las casas de compraventa de oro lo que permitió la detección de la falsedad de las piezas, inicialmente valoradas en 700 euros, que pasaron las pruebas de detección de imán y de piedra de toque.
Al comprobar que las pulseras ofertadas no eran de oro se evitó el pago del dinero a los falsificadores, quienes huyeron al observar las medidas de seguridad que adoptaban los vendedores. La Policía busca ahora a estas personas, a la vez que ha difundido una alerta temprana a todas las casas de compraventa de la ciudad.
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