El PP estudia instalar cámaras de seguridad en el exterior de sus sedes tras el ataque en Ribadumia (Pontevedra)

El Partido Popular estudia la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en el exterior de sus sedes tras el ataque al local en el que se ubica el PP de Ribadumia (Pontevedra).
Louzán
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EUROPA PRESS
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El Partido Popular estudia la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en el exterior de sus sedes tras el ataque al local en el que se ubica el PP de Ribadumia (Pontevedra).

El presidente provincial del PP, Rafael Louzán, que es concejal de esta formación en Ribadumia, ha condenado "enérgicamente este reprobable ataque" y ha recordado que este ataque se suma a otros actos violentos contra sedes populares de toda la provincia.

Louzán ha señalado que la familia propietaria de este edificio, sito en el número 7 de la calle Cruceiro Vello, vive en el primer piso y está preocupada. "Los intolerantes que tienen este tipo de actitudes nunca piensan en el daño que les pueden causar a las familias que viven en el entorno", lamentó.

"Entiendo que se trata de un grupo reducido de radicales que espero que sean identificados", dijo el presidente provincial convencido de que "por las formas, todo parece indicar que son los mismos que actuaron en anteriores ocasiones". "Esto no lo puedo afirmar con rotundidad deben ser las fuerzas y cuerpos de seguridad quienes esclarezcan este suceso", apostilló.

El mandatario popular animó a los suyos para que la violencia "no aminore la actividad de un partido político", aunque en el plano doméstico asumió que "estas cuestiones encarecen" su labor.

Así, Rafael Louzán desveló que durante la madrugada comentó con el subdelegado de Gobierno en Pontevedra, Antonio Coello, "que este suceso obligará a colocar en aquellos lugares en los que hay viviendas en la parte superior algún tipo de cámaras que puedan ayudar a saber y tener información sobre los autores de actos como éste".

La instalación de videocámaras en las sedes ya se había planteado en el Partido Popular con ocasión de anteriores atentados, pero Louzán reconoció que se aplazó la decisión por el elevado coste económico que implica. "Hay que entender que al igual que las familias la crisis también nos afecta a todos los partidos políticos y los medios que tenemos son muy escasos", explicó.

En todo caso Louzán abogó por "primar la seguridad de las personas y de los edificios a otros gastos" para salvaguardar la labor cotidiana del Partido Popular. "Esperemos que las cámaras nos sirvan para controlar a este tipo de delincuentes que hacen este tipo de barbaridades", concluyó.

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