Las 100 mayores empresas de Girona por volumen de facturación han conseguido sortear la crisis en 2010 con un incremento de su cifra de ventas del 6,48% respecto al ejercicio anterior, pasando de 6.856 millones de euros a 7.300 millones de euros, tal como recoge la última edición del informe Girona 100 elaborado por KPMG y la Cátedra Cámara de la Empresa Familiar de la Universidad de Girona (UdG).

Los datos presentados este miércoles en rueda de prensa muestran que el beneficio neto de estas empresas crece en 2010 casi el 139% gracias a una mayor facturación y a una significativa reducción de las empresas con pérdidas, según ha explicado el responsable de KMPG en Girona, Manel Blanco.

Otro dato a destacar es que de las cien empresas, 78 son familiares y generan un 84% de la ocupación; el sector cárnico es el más importante con 21 empresas entre las cien —veinte de las cuales familiares— y con un volumen de negocio del 26%.

Del total de empresas del estudio, 70 se mantienen desde el inicio del mismo y en relación al de 2009, han salido tres empresas, principalmente del sector de la construcción.

Blanco ha remarcado que del grupo de las 70 fijas, una decena en 2009 aportaba pérdidas por un valor de 25 millones de euros, mientras que en 2010, estas diez cuentan con 52 millones de euros de beneficios.

"Estos datos son un indicativo de que las principales empresas han hecho los deberes, han innovado y han modificado su modelo de negocio, buscando oportunidades en mercados internacionales porque lo importante era cambiar de mentalidad y buscar nuevas oportunidades", ha apuntado la directora de la Cátedra Cámara de la Empresa Familiar de la UdG, Pilar Marqués.

"estamos desamparados"

El estudio Girona 100 también contempla la parte cualitativa y lo hace basándose en diferentes grupos de discusión con los responsables de las empresas; entre las principales conclusiones está que el sistema financiero ha sido uno de los principales obstáculos para los empresarios, lo que les ha obligado a buscar alternativas.

"Yo ya no cuento con los bancos", apuntaba uno de los empresarios según el informe, y es que el nuevo modelo de negocio se basará en capital propio y dejará de depender exclusivamente de las entidades financieras.

Otro punto a tener en cuenta es que las administraciones públicas han dejado de invertir en políticas de financiación de I+D, por lo que los empresarios han aprendido a prescindir de ello, aunque se han sentido "desamparados".