El consejero de Medio Ambiente, Javier Fernández, ha reprochado al diputado socialista Miguel Angel Palacio que critique al Gobierno por "intentar solucionar" un "enorme problema" que precisamente generó el PSOE, que durante sus ocho años al frente de la Consejería de Medio Ambiente "renunció al cobro" de la "deuda histórica" de los ayuntamientos con la antigua Empresa de Residuos (ERC), hoy MARE.
Para Fernández, las manifestaciones de Palacio son "un ejemplo de irresponsabilidad y de hasta dónde se puede distorsionar la realidad por intereses partidistas". "Una muestra más -dijo- de cómo funciona el PSOE, por desgracia, en nuestra región y en el país: primero crean un enorme problema, no hacen absolutamente nada para solucionarlo y luego critican a quien intenta solucionar el problema", espetó en declaraciones a Europa Press.
En este sentido, señaló que durante su mandato, el PSOE no recaudó "ni un solo euros" de esa "deuda histórica" anterior a 2005, que asciende a 14,5 millones de euros, mientras que en un año, el Gobierno del PP ha recaudado "más de 2,5 millones de euros".
El consejero ha rechazado todas las críticas del parlamentario socialista, que le ha acusado de ocultar la deuda de Santander y de "condonar" a este ayuntamiento no el 50% de la deuda, sino el 66%, equivalente a más de cuatro millones de euros.
Fernández ha opinado que Palacio "se ha superado a sí mismo, porque no sólo falsea la realidad por intereses partidistas, sino que además está sembrando una cizaña en los Ayuntamientos que ha dado como resultado desconcierto, confusión y alarma en muchos equipos de Gobierno". "O es un malintencionado o no se quiere enterar porque la realidad no le interesa", apostilló.
El consejero ha explicado que la única forma de cobrar una deuda es ir a los juzgados, pero con los precedentes de las sentencias que en 2005 declararon nulos los procedimientos de recaudación por parte de MARE, el resultado de acudir a los tribunales resulta "incierto", por lo que la Consejería de Medio Ambiente ha optado por proponer a los Ayuntamientos "un reparto de los riesgos", de forma que paguen el 50% de la deuda no prescrita en diez años.
Sobre el caso concreto de Santander, aseguró que una parte de la deuda responde a cantidades prescritas. "Así lo consideran los propios servicios financieros de MARE", destacó el consejero, quien puntualizó que son cantidades prescritas "por la mala actuación del Gobierno anterior".
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