La Justicia argentina ordenó este lunes la detención de cuatro directivos de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA), dentro de la causa que investiga un accidente ferroviario en la capital argentina en el que murieron 51 personas, informaron fuentes judiciales.

El juez a cargo de la investigación, Claudio Bonadío, ordenó la detención de Claudio Cirigliano, dueño de uno de los grupos de empresas de transporte público más importante de Argentina, entre las que se encuentra TBA.

El magistrado también dispuso las detenciones del presidente de TBA, Carlo Ferrari; el gerente operativo de la empresa, Darío Tempone, y el director administrativo de la compañía, Daniel Rubio.

Fuentes judiciales citadas por la agencia oficial Télam indicaron que el juez responsabiliza a estos directivos de, supuestamente, "obstruir el proceso de investigación" del accidente.

El pasado 24 de mayo, el Gobierno argentino rescindió el contrato de concesión de trenes de pasajeros a TBA, tres meses después del accidente ferroviario en la estación porteña de Once que dejó 51 muertos y más de 700 heridos y evidenció el pésimo estado del servicio.

La medida fue dispuesta por un decreto de la presidenta, Cristina Fernández, que quitó a la compañía la explotación de las líneas Sarmiento y Mitre, que enlazan la provincia de Buenos Aires con la capital, por el "deficiente estado de conservación y mantenimiento del material rodante y deterioro de la capacidad y calidad de los servicios prestados".

El Gobierno había intervenido TBA el pasado 28 de febrero, seis días después del accidente ocurrido en plena hora punta matinal, cuando un tren procedente de la localidad bonaerense de Moreno -en la línea Sarmiento- se empotró contra un andén de la estación de Once, una de las tres más importantes de Buenos Aires.

Roque Cirigliano, director de material rodante de TBA, aseguró este luness ante el juez del caso que el tren siniestrado no tuvo problemas técnicos y que sus frenos funcionaban correctamente. Para este martes, Bonadío ha citado a declarar a Juan Pablo Schiavi, quien estaba a cargo de la Secretaría de Transporte de Argentina en el momento del accidente ferroviario.