Eso es algo que cambia cada año. Si se quedan en la Península, buscan turismo de sol y playa; si salen fuera, suelen elegir las grandes capitales de Europa, como Londres, París, Praga o una ruta por Italia.

¿Viajamos más o menos que en los últimos veranos?

Este año viaja menos gente por el mundial y porque muchas familias han dedicado los ahorros de las vacaciones a comprar teles de plasma.

¿Qué nos gusta de España?

De las islas, Tenerife; para el sol y la playa, Chiclana y la costa de Almería. Los que prefieren otro tipo de viaje se van a Galicia, Asturias o los Picos de Europa.

¿Y de fuera?

Los destinos fijos son Europa, Punta Cana y la Riviera Maya saltando el charco. China es un mercado emergente y Tailandia se recupera poco a poco tras el tsunami.

¿Existe un destino favorito?

El crucero sigue siendo el rey de los viajes. Es lo más demandado, lo más apreciado y con lo que se disfruta más.

¿En familia o en pareja?

En verano, en familia. Las parejas hacen escapadas el resto del año. Los hábitos han cambiado un poco.

¿Cuál es la estancia media?

Ahora ya no se viaja un mes. Lo más solicitado son las siete noches; tres si es a alguna capital europea.

¿Y cuánto estamos dispuestos a gastarnos?

Depende del viaje. Una familia de cuatro miembros gasta unos 1.600 euros si se queda en la Península. Europa sube hasta los 3.000, y un crucero, hasta los 6.000 euros.

¿Hay lugares que hayan perdido interés?

Egipto y Turquía pierden adeptos por temor a la guerra y los atentados.

BIO

43 años, casado y con cuatro hijos.  Es un apasionado de las motos. Le gusta el deporte, la pesca y, cómo no, viajar.