A pesar de que A Coruña y Lugo vendieron menos cajetillas que en 2005, Ourense y Pontevedra repartieron más y subieron las ventas totales de la comunidad. «A esas dos provincias llega gente de Portugal para comprar tabaco, porque en su país es más caro.

También tienen más turistas», explica Joaquín Rodríguez Salcedo, presidente de la Asociación Provincial de Estanqueros de A Coruña. Con todo, según los responsables de las expendedurías, los gallegos son reacios a dejar de repente el hábito de fumar. «Aquí somos rebeldes. Si nos dicen que lo dejemos, fumamos más», afirman los estanqueros.

Ahora los que más intentan abandonar los malos humos son los gallegos de más edad, con problemas de salud. «Los jóvenes fuman mucho y también los que tienen entre 30 y 40 años. No les valen ni los parches», dicen.

Repunte. Más consumo

Curiosamente, con la entrada en vigor este año de la ley antitabaco los gallegos compran más tabaco. Pero entre 2004 y 2005 bajó la venta en 144 millones de paquetes.

Muerte. 10 fallecidos al día

Cada día mueren en Galicia diez personas a causa de los efectos del tabaco, según datos de la Consellería de Sanidade. Y el 25% de la población gallega asegura que fuma a diario.