La víctima era oficial de segunda y trabajaba para la empresa Mariano López Navarro con un contrato por obra y servicio desde el pasado mes de marzo. Hacía el turno de noche (de 00.00 a 8.00 horas) y ayer, sobre las 7.15 h, poco antes de acabar su turno, sufrió el trágico accidente, cuyas causas están siendo investigadas. Al parecer, los cables de soldadura se engancharon, poniendo en marcha la máquina cuando el trabajador estaba dentro.

Causas desconocidas

Lo que todavía no está claro es cómo pudo suceder, ya que las tolvas tienen un mecanismo de seguridad que impide que se active la máquina cuando la tapa está levantada, pero en este caso no funcionó.

Las tolvas de toda la planta pueden activarse también desde un cuadro de mandos general, pero no se conectan hasta las ocho, según explicaron miembros de los sindicatos UGT y CC.OO. No se sabe si había más gente con el trabajador, pero es posible que se encontrara solo porque quienes alertaron de lo ocurrido fueron los trabajadores del siguiente turno.

Los representantes sindicales manifestaron ayer su preocupación porque este primer accidente mortal en la Expo se ha producido con 300 trabajadores en activo y temen lo que pueda pasar cuando haya 3.000 y trabajen en las alturas. La víctima forma parte de uno de los colectivos con más accidentalidad, los inmigrantes, y pertenecía a una empresa no sindicalizada, sin comité de empresa ni formadores sobre riesgos laborales.

Freddy Alberto Arenas vivía en España desde hace 5 años con su mujer y un hijo.

El acuerdo laboral

La sociedad Expoagua firmó un acuerdo laboral con los sindicatos y la DGA el pasado 21 de marzo para regular las condiciones laborales de los trabajadores. Dicho acuerdo implica la presencia física de los técnicos de Inspección de Trabajo y de técnicos del Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral, que de momento no están porque es una fase temprana. Según el acuerdo, hay que pedir explicaciones a la empresa que gestiona las obras (Expoagua) y ésta, a su vez, a la empresa contratada (MLN).