"He hablado telefónicamente con el Rey en las últimas horas y lo he encontrado con buen ánimo porque se recupera bien, incluso me he permitido bromear, diciéndole que podríamos ser compañeros de baile: él lleva una prótesis en la cadera derecha y a mí, hace un tiempo, me implantaron otra en la cadera izquierda. Pero también lo he encontrado preocupado por las lecturas que se están haciendo de su viaje", así comienza el artículo que José Cusi, armador del velero Bribón y amigo de Don Juan Carlos, publica en La Vanguardia.

Cusi explica que el rey tenía pensado ir a Botsuana en las vacaciones de Semana Santa, viaje que tuvo que posponer por un viaje a Kuwait para, entre otras razones, "asegurar el suministro de petróleo a España gracias a su amistad con la casa real de aquel país". "Don Juan Carlos me ha confesado que le hacía ilusión el desplazamiento, pero que es posible que no haya sido una decisión acertada", apunta el armador.

El resto del artículo es una defensa de la caza, "deporte (...) que, gustará o no, genera miles de puestos de trabajo en nuestro país". Y de las cacerías de elefantes que actúan "como regulador de la población de animales en África"  y es "una importante fuente de riqueza para una región empobrecida y despoblada".

Según Cusí', estos días se han vertido "comentarios injustos con respecto al jefe del Estado, cuando, si repasamos su biografía, nadie puede poner en duda toda una vida de sacrificio por su país".

El armador, que asegura concer a don Juan Carlos "desde hace más de cuarenta y cinco años", dice que le "consta" que lo está pasando mal "no tanto por la fractura, como por algunos comentarios que se han hecho estos días". A su parecer, "juzgar a la Corona por el incidente de Botsuana no es irracional, sino sobre todo injusto. Pero el Rey ha tomado nota de que son tiempos en los que hay que evitar los tropiezos, en las escaleras de un bungalow y en la vida pública", concluye el artículo.