El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha cerrado el Debate de la Nacionalidad volviendo a tender la mano al Estado para recuperar el diálogo en aquellos asuntos que responden al interés general de las islas, pues sólo así se logrará "una canarias en la que se pueda vivir mejor".

El presidente Rivero, que ha aprovechado para agradecer a los portavoces el tono de sus intervenciones, espera que las conclusiones del debate "puedan dar algo de luz, acuerdo y consenso a aquellos asuntos que son del interés general", máxime cuando la situación que vive el mundo desarrollado —de la que no es ajena Canarias— es "difícil, muy grave y muy dura".

Paulino Rivero ha hecho hincapié en que las islas se enfrentan a una coyuntura que obliga a que el Gobierno tenga "la ideas claras de cómo abordar el presente y el futuro de Canarias", que pasa por un modelo económico "más competitivo, de más calidad, que apueste por la excelencia y la sostenibilidad, y ello, trabajando con el resto de los agentes que forman parte de la sociedad canaria".

Para ello, el presidente canario insistió en que hay que seguir apostando por el turismo, el sector primario, la emprendeduría, la pequeña y la mediana empresa o la industria, de manera que se pueda generar "una transformación del modelo productivo canario para que generen más oportunidades de trabajo". "Sólo así es posible mantener la sanidad, la educación y las políticas sociales y una canarias en la que se pueda vivir mejor", insistió.

"Para conseguir este objetivo, el Gobierno de Canarias tiende la mano al diálogo porque es lo que debe prevalecer, sobre todo, en estos momentos de especial dificultad", concluyó.