El exregidor de Sada y actual primer teniente de alcalde de este municipio coruñés, Ramón Rodríguez Ares, ha negado la tala sin autorización de 360 árboles cuando era alcalde, en el juicio que ha comenzado este lunes en la Audiencia Provincial de A Coruña por un supuesto delito contra el medio ambiente y otro de prevaricación ambiental.

Por estos hechos, que supuestamente se habrían cometido en el año 2005 cuando Rodríguez Ares gobernaba en Sada, está también acusado el exconcejal de Urbanismo y en la actualidad concejal de Obras, Emilio Gómez, tras el acuerdo de gobierno alcanzado por la Agrupación Progresista de Sada Independiente (APSI), a la que ambos pertenecen, con el PP.

Según la Fiscalía, en abril de 2005, el entonces alcalde de Sada ordenó, sin esperar la autorización necesaria, la tala "de un mínimo de 360 árboles, cantidad muy superior a la solicitada", añade. Así, afirma que la solicitud y la autorización concedida con posterioridad "solo amparaba la corta en una superficie de 0,05 hectáreas y se realizó en 1,05", en una zona que limita con el humedal de As Brañas.

El ministerio público sostiene también que Augas de Galicia, dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, acordó la paralización de las obras iniciadas en la zona, en mayo de ese año, y añade que los acusados "hicieron caso omiso" de la misma "y encargaron los trabajos de relleno".

Tala de 70 ÁRBOLES

En su declaración, en la primera sesión del juicio, que está previsto que se prolongue hasta el miércoles, Rodríguez Ares ha argumentado que fueron "alrededor de 70" los árboles talados —la autorización era de 77— y que "la mayoría estaban podridos".

Además, ha argumentado que la mayor parte del terreno estaba catalogado como "suelo urbano" y que, por ello, "no era necesaria autorización".

A preguntas de su defensa, ha señalado que la solicitud de la autorización fue "un exceso de celo, pero no era necesario", ha recalcado. No obstante, sobre la tala de árboles en la parte próxima al humedal, ha añadido que, tras recibir la orden de paralización, se comunicó al contratista de las obras "que tenía que esperar", ha apostillado.

En contestación a las preguntas de su abogado, ha atribuido "a un exceso de rapidez" por parte del contratista el hecho de que en esa zona ya se hubiesen efectuado algunos trabajos. Por otra parte, Rodríguez Ares ha incidido en que el humedal no está "protegido ni catalogado" y que el terraplén que se hizo respondió a una medida de precaución para evitar "riesgos".

En su declaración, ha exculpado a su compañero de partido y actual concejal de Obras, del que asegurado que únicamente le acompañó a las obras y que "no tomaba decisiones". Este mismo argumento mantuvo Emilio Gómez en su declaración.

Criticas al bng

Por otra parte, sobre el hecho de que en esa zona no estén ubicado el colegio proyectado, el exalcalde de Sada ha culpado de ello al BNG, "que estaba interesado en que no se hiciera", ha añadido en relación "a sus múltiples denuncias", ha apostillado.

En su calificación, el fiscal pide para el exalcalde de Sada una pena de seis años y nueve meses de prisión, además del pago de una multa de 13.680 euros y a la inhabilitación para empleo o cargo público durante seis años.

Para el entonces primer teniente de alcalde, reclama cinco años de cárcel por un delito contra el medio ambiente, el pago de una multa de 10.800 euros y la inhabilitación para ejercer un empleo o cargo público durante la condena privativa de libertad.