Nick Standen, un ciudadano inglés afincado en el municipio malagueño de Benamargosa, quería que, al morir, su colección de reptiles fuera donada a Bioparc Fuengirola. Se trata de 71 animales de 12 especies diferentes, algunos de gran valor biológico.

Poco antes de morir, este inglés manifestó su deseo a familiares y amigos de que su colección fuera a manos de alguna entidad que compartiera su filosofía de preservación de la naturaleza y conservación de especies. Hace un mes informaron a Bioparc de este hecho y el parque optó por continuar la labor de Standen.

Este apasionado de la herpetología era miembro de varias asociaciones inglesas de este tipo y, de hecho, además de mantener estas especies había conseguido reproducir algunas tan raras como la pitón de Angola (Python anchietae), de la que solo existe un único ejemplar en un zoo europeo y 63 en el resto de zoos del mundo.

Otras especies de gran valor biológico es la boa arborícola anulada (Corallus annulatus annulatus) o la boa de Madagascar (Sanzinia madagascariensis). Esta última se encuentra dentro del Programa Europeo de Reproducción de Especies Amenazadas de la Asociación Europea de Zoos y Acuarios.

Actualmente, la colección está adaptándose a su nuevo hogar y los técnicos de Bioparc Fuengirola están adecuando las instalaciones para alojar los animales en las mejores condiciones posibles. Por este motivo, aún no es posible contemplar ninguna de estas especies en los recintos exteriores.

La Fundación Bioparc ha agradecido la donación y se ha comprometido a continuar la labor que hasta ahora había llevado a cabo este amante de la naturaleza. Entre otros proyectos que actualmente tiene en marcha la Fundación figuran el de conservación del sapo partero bético, el apoyo a proyectos de conservación en África liderados por conservacionistas españoles como Ainare Idoiaga y su proyecto de reintroducción de driles (Mandrillus leucophaeus) en Nigeria, o el Proyecto del Dragón de Komodo (Varanus komodoensis) para proteger la Reserva de Wae Wuul, en Indonesia, de su bosque monzónico y los dragones que viven en ella.