El portavoz del Grup Compromís en el Ayuntamiento de Valencia, Joan Ribó, ha propuesto medidas de ahorro energético, como el apagado de la mitad de las farolas, ante la situación de "derroche de recursos en iluminación" que llegó a provocar "al corte de fluido eléctrico" el miércoles en algunas de las instalaciones del consistorio.

Ribó ha explicado, en un comunicado, que desde que Rita Barberá asumió la alcaldía el número de farolas se ha duplicado hasta alcanzar las más de 92.000, con un coste de 160 millones de euros. En 2010 cada valenciano consumió en iluminación pública 93'6 Kwh "una cifra que es el 52 por ciento más que en Madrid y un 63 por ciento más del consumo medio de Barcelona". A fecha 11 de noviembre del 2011, el ayuntamiento

adeudaba a las empresas comercializadoras de electricidad 15 millones de euros, según los datos aportados por Compromís.

Ribó ha asegurado que "no se tiene ninguna duda" de que la política de iluminación en Valencia "parece diseñada por el consejero delegado de una compañía suministradora de electricidad, más preocupado por los beneficios de sus acciones, que por el despilfarro del dinero público".

En este sentido, Compromís propone un cierre de las farolas que están "sobreiluminando" la ciudad. "Sin ir más lejos, Llíria acaba de reducir un 30 por ciento su iluminación exterior", ha argumentado. Valencia debería apagar aproximadamente la mitad de sus farolas para tener una iluminación "comparable a Madrid y para no ir engordando las deudas del ayuntamiento en este tema", ha indicado.

Ribó le ha recordado a Rita Barberá y al vicealcalde Alfonso Grau que hay un Reglamento de eficiencia energética en instalaciones de Alumbrado exterior que "hay que poner en marcha en la ciudad". En este Real Decreto 1890/2008 se definen conceptos como deslumbramiento perturbador, luz intrusa o molesta o resplandor luminoso nocturno. "Si se aplicara este decreto veríamos que nuestra ciudad no está bien iluminada, sino sobreiluminada con todo el exceso de consumo que ello supone", ha explicado.

Ribó ha comentado que los "excesos" en consumo eléctrico

son una de las causas de "no poder hacer frente adecuadamente a sus

obligaciones".

"queremos que se pague a todo el mundo"

Por otra parte, el portavoz del Compromís ha indicado que desde su agrupación se pretende que "se pague a todo el mundo, sean empresas grandes o pequeñas". Ribó ha contestado así a las declaraciones del vicealcalde Alfonso Grau que dijo que "lo que lamento profundamente es que quien dice defender a los más débiles —compromís— pida que a los fuertes se les pague corriendo" tras el corte de suministro eléctrico en algunas dependencias municipales.

Ribó le ha respondido que desde Compromía "aún se está esperando el día que la alcaldesa Barberá pare un desahucio o haga una gestión con Iberdrola para que restituyan el servicio a los parados que no pueden pagar el suministro eléctrico".

El portavoz municipal cree que las administraciones publicas y, en concreto, el Ayuntamiento de Valencia "no puede ser responsable de los impagos que están ahogando a tantas y tantas empresas, con el riesgo que ello conlleva para el mantenimiento de puestos de trabajo".

Según los datos aportados por Compromís hay 3.313 facturas y obligaciones que no se habían pagado por la Tesorería municipal a 31 de diciembre de 2011, por un importe de deuda pendiente de pago de 189,8 millones de euros.