La familia del joven muerto por la Guardia Civil señala que no había ningún control policial

El juez titular del Juzgado de Instrucción número 1 de San Roque (Cádiz) ha decretado el secreto del sumario en el caso de la muerte de Miguel Clavijo, de 21 años, que en Jimena de la Frontera (Cádiz) recibió ayer un disparo, al parecer fortuito, de un agente de la Guardia Civil. El agente que disparó contra el joven, que no ha sido detenido, se encuentra de baja.
Imagen de la calzada en la que recibió el disparo 'fortuito' el joven fallecido. (Efe)
Imagen de la calzada en la que recibió el disparo 'fortuito' el joven fallecido. (Efe)
Efe
Imagen de la calzada en la que recibió el disparo 'fortuito' el joven fallecido. (Efe)

El agente se encontraba manipulando la pistola reglamentaria cuando participaba en un dispositivo de vigilancia cerca de este municipio, en el kilómetro 23 de la A-405 (que une Algeciras y Jimena) y a una distancia de unos quince metros de dicha carretera.

Por esa vía circulaba una furgoneta en la que la víctima viajaba como copiloto, según informó en un comunicado la Subdelegación del Gobierno en Cádiz.

Vecino de Estepona

Además del fallecido, en el vehículo viajaban el conductor y una tercera persona. La Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil es la encargada de instruir las diligencias.

El cadáver se encuentra en el tanatorio Botafuego de Algeciras, a donde han llegado allegados de la víctima, en su mayoría procedentes de Estepona (Málaga), de donde es originaria la familia.

Contradicen a la policía

La tía de Miguel Clavijo ha afirmado que los ocupantes del vehículo en el que viajaba su sobrino aseguran que no vieron ningún control en la carretera por la que circulaban.  En la furgoneta, según relató María Clavijo, viajaban Miguel, un

primo suyo y otro compañero de trabajo que habían comido en una venta y se dirigían a Algeciras.

El fallecido trabajaba, junto a sus dos compañeros, en una empresa familiar de Estepona que se dedica al sondeo y perforaciones de pozos y llevaban una semana trabajando en Jimena de la Frontera.

María Clavijo señaló que, por lo que han contado las otras dos personas que viajaban en la furgoneta, no se dieron cuenta de dónde venía el tiro hasta que los agentes salieron de unos matorrales.

Accidente... o no

Cuando oyeron el disparo, el conductor, primo del fallecido, paró la furgoneta para atender al herido, que murió en sus brazos, según relató María Clavijo.

O ha sido un accidente o iban buscando a alguien y se han equivocado

"O ha sido un accidente o iban buscando a alguien y se han equivocado", dijo a los periodistas. La familia del fallecido está haciendo las gestiones oportunas para poder trasladar el cadáver a Estepona y enterrar a Miguel Clavijo.

El agente, de baja

Por su parte, el agente de la Guardia Civil que efectuó el disparo y que no está detenido está de baja médica debido a su estado psicológico.

Esto ha supuesto la retirada de su arma reglamentaria.

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