Los diputados socialistas en el Congreso por Asturias Antonio Trevín y María Luisa Carcedo han expresado este viernes su rechazo a la política energética esbozada por el Gobierno de Mariano Rajoy, por ser "manifiestamente insolidaria" y poner en jaque "1.250 empleos" asociados al sector de las renovables en el Principado.

Ambos han comparecido en rueda de prensa, para anunciar que el PSOE continuará batallando por el carbón, con la esperanza de que en este primer trimestre del año se pueda discutir en el seno de la Cámara una proposición no de ley en la que exigen al nuevo Ejecutivo el cumplimiento de los acuerdos adoptados en el Plan Nacional del Carbón.

En este sentido, Antonio Trevín ha considerado que el PP no tenía más plan para el futuro del mineral que "una oposición poco constructiva" para llegar al Gobierno y una vez allí "no saben tampoco qué hacer con las comarcas mineras", compensadas por presentar unas debilidades superiores a las del conjunto de España.

El socialista ha indicado que las tres comparecencias del ministro del ramo hasta la fecha han sido contradictorias y ha recordado, que de acuerdo a la última, el Gobierno financiará las infraestructuras asociadas a los fondos mineros acabadas, estudiará las que está en marcha y no abonará los fondos presupuestados para las que todavía no se han iniciado.

Además, ha defendido que el PSOE "nunca podrá estar de acuerdo" con que el cumplimiento del ajuste impuesto por el Ministerio de Hacienda sea "a costa de quien más necesita inversiones en España y en Asturias".

En último término, ha hecho un llamamiento a la "reflexión" y al "diálogo" de los gobernantes, a quienes ha acusado de "desmontar lo diseñado durante los últimos treinta años" para afrontar la reconversión del carbón del modo menos traumático. RENOVABLES

En términos similares, la parlamentaria socialista Maria Luisa Carcedo ha subrayado que el Partido no alcanza a entender la retirada de ayudas anunciada por el Gobierno para el sector de las renovables. Así, ha defendido que se trata de un sector pujante, que arroja beneficios para las arcas del Estado y que necesita consolidarse para alcanzar el objetivo de que un 20 por ciento de la producción energética nacional proceda de este tipo de energía limpias en el año 2020.

Carcedo ha destacado que la medida "pone en jaque la planificación energética" y el futuro de un sector que en Asturias tiene una importancia "crucial", por lo que ha comprometido que el PSOE seguirá liderando iniciativas contrarias a los planes del Ejecutivo.