UGT avisa de que la reforma educativa del PP "no soluciona el problema de la enseñanza ni en Andalucía ni en España"

El secretario general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT-Andalucía, Juan Carlos Hidalgo, ha advertido este miércoles de que los tres pilares centrales de la reforma educativa anunciada por el Gobierno de Mariano Rajoy --ampliación a tres años del Bachillerato "en detrimento de la Educación Secundaria Obligatoria, eliminación de la asignatura Educación para la Ciudadanía y "potenciación" de los centros privados-- "no atajan el fracaso escolar, el mayor mal de este sistema" y tampoco "soluciona el problema de la enseñanza ni en Andalucía ni en España".

El secretario general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT-Andalucía, Juan Carlos Hidalgo, ha advertido este miércoles de que los tres pilares centrales de la reforma educativa anunciada por el Gobierno de Mariano Rajoy —ampliación a tres años del Bachillerato "en detrimento de la Educación Secundaria Obligatoria, eliminación de la asignatura Educación para la Ciudadanía y "potenciación" de los centros privados— "no atajan el fracaso escolar, el mayor mal de este sistema" y tampoco "soluciona el problema de la enseñanza ni en Andalucía ni en España".

En su opinión, las medidas hechas públicas ayer por el ministro de Educación, José Ignacio Wert, "cuestionan los resultados de los centros públicos para justificar el avance de la enseñanza privada" y "abre la puerta a conciertos de Bachillerato para los centros privados", algo que, según explica en un comunicado, "va en detrimento de los centros públicos".

"Ampliar el Bachillerato a tres años supondrá un alto coste económico y organizativo y no ataja el mayor problema de la enseñanza española: el fracaso escolar", sentencia Hidalgo, para quien la mejor opción es "una tercera" ideada por su sindicato y que consiste en "realizar el Bachillerato en dos o tres cursos escolares, dependiendo de las necesidades del alumno, pero nunca a costa de la enseñanza obligatoria". Sobre todo, recalca el sindicalista, porque la comunidad educativa "está harta de que cada Gobierno cambie la legislación educativa" y porque se hace cada vez más necesario "un pacto de Estado para configurar el sistema".

Sobre la sustitución de la asignatura Educación para la Ciudadanía por Educación Cívica y Constitucional, Hidalgo cree que se trata de una polémica "absurda" y que "da contestación a las demandas del sector más radical del voto popular". Asimismo, defiende que "la materia no adoctrina", sino que "habla sobre derechos humanos" y que, por tanto, "cambiarla ahora supone un coste para las familias y los centros al cambiar de libros de texto".

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