El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha asegurado que el Gobierno regional "ha paralizado" las obras del Hospital de Toledo porque "quiere replantear el asunto", y ha añadido que la Junta de Comunidades "quiere mezclar el final de la obra del Hospital con el negocio".

García-Page ha señalado, durante su visita a las obras del Palacio de Congresos, que la gestión público-privada "puede valer como modelo de gestión para muchos servicios", pero ha asegurado que "mezclar la salud con el dinero es algo muy arriesgado".

A preguntas de los medios sobre la reunión que mantuvo con el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, García-Page ha explicado que el consejero le planteó "que querían hacer un replanteamiento del proyecto pero sin más precisiones, sin saber qué alcance y qué dimensión" iban a tener estos cambios.

Asimismo, ha asegurado que tanto el Ayuntamiento como la Junta se comprometieron a "cruzar información" sobre este proyecto, sin embargo, según ha indicado el alcalde, no les están dando ningún "detalle" del mismo.

Por eso, ha afirmado que, aunque está "molesto e indignado con la situación", está "dispuesto a escuchar razones y argumentos técnicos" porque su interés es que esta obra "vaya para adelante".

No será gratuito

Por otra parte, el alcalde de Toledo ha explicado que la obra, proyectada para "una ciudad que quería tener la mejor sanidad durante los próximos 50 y 60 años", tendría que haberse abordado "con el mismo criterio" que el Palacio de Congresos, es decir, "con la mentalidad de superar los problemas, de ofrecer soluciones", porque "lo fácil", según García-Page, "es volver para atrás".

Sin embargo, "marchar hacia atrás también gasta combustible", ha asegurado el alcalde, quien además ha añadido que "si alguien piensa" que la paralización de las obras "es gratis, no lo es", y ha puesto de ejemplo el Palacio de Congresos para afirmar que "las cosas se hacen si se quieren hacer aunque cueste mucho esfuerzo y mucho tesón, como es el caso".

Factura "elevadísima"

Según el alcalde, la factura que "en términos sociales y en términos económicos" va a pagar la región ante la parálisis del Hospital va a ser "una factura elevadísima", ya que "probablemente una generación entera se va a ver afectada por la situación de parálisis actual de la Administración".

"Lo malo", bajo su punto de vista, "es que la ciudad, con esta inversión, si se paraliza y se echa para atrás, pierde tiempo" y ha añadido que si el Partido popular estuviera en la oposición, y no al frente del Gobierno regional, habría "acusaciones todos los días".