Un 8,2 por ciento de los ciudadanos vascos ha concluido, reducido o sustituido su colaboración económica con las ONG durante 2011, frente al 17,2 por ciento de media para el conjunto del Estado, según los datos del tercer estudio 'La ONG que quiero por navidad' elaborado por la Fundación Adecco, con la colaboración de Achalay España.

Para la realización de este estudio, se ha encuestado a 600 ciudadanos residentes en España, de edades comprendidas entre los 18 y los 65 años. Los responsables del informe han explicado que, en función del último informe de la Asociación Española de Fundraising, el 9 por ciento de la población española colabora económicamente con una ONG, ya sea de forma regular o puntualmente, lo que se traduce en 3,6 millones de donantes que destinan un total de 670 millones de euros al año.

El estudio analiza la incidencia de la crisis en estas aportaciones y señala que "tal vez" la menor influencia del desempleo en Euskadi, en comparación con la media estatal, explique que el descenso del número de donantes "no haya sido tan acusado".

De hecho, un 91,8 por ciento de los encuestados vascos afirma que sigue colaborando del mismo modo este año que el anterior. El 8,2 por ciento restante ha variado su aportación económica, debido a que la ha reducido o sustituido, o porque ha dejado de colaborar.

Un 5,2 por ciento se ha visto obligado a poner fin a sus donaciones durante el último año y un 2,6 por ciento ha reducido o espaciado esta colaboración. Además, un 0,4 por ciento ha sustituido la aportación dineraria por otro tipo de ayudas, como donación de materiales o voluntariado.

Entre las causas aducidas para reducir o finalizar la colaboración con las ONG, un 97,6 por ciento cita la influencia de la crisis y el descenso de sus recursos económicos. Un 2,4 por ciento lo achaca a la falta de transparencia de la entidad en cuestión.

El estudio augura que el número de donantes seguirá cayendo, aunque "las previsiones son relativamente optimistas: sólo un 3,4 por ciento ha declarado que tiene previsto reducir su colaboración económica en el próximo año, o incluso finalizarla, pues tiene que recortar y empieza por lo menos necesario".

Más exigentes

Otro de los efectos de la crisis apuntado en el informe es el aumento de las exigencias de los ciudadanos en su colaboración con las ONG. Según los datos de esta encuesta, las características más valoradas de una entidad sin ánimo de lucro son su reputación y notoriedad (86,1%), seguidas de la transparencia (83,9%) y la independencia (62,8%).

Los colectivos con los que habitualmente se prefiere colaborar son la infancia (90%), seguida de las personas con discapacidad (60%) y los mayores (35%). El grupo de desempleados ha sido escogido por el 34 por ciento de los encuestados, una cifra que supera en 9 puntos porcentuales a la del año pasado (25%).

Por el contrario, los grupos que menos interés despiertan a los encuestados son los reclusos (2%), las prostitutas (6,6%) y los drogodependientes (9,9%).