La Fiscalía pide casi veinte años de prisión para un vecino de la localidad pontevedresa de Salceda de Caselas por los delitos de allanamiento de morada, agresión sexual en grado de tentativa, detención ilegal, maltrato, y un delito de amenazas continuado.

El juicio ha sido señalado por la sección cuarta de la Audiencia provincial de Pontevedra para el próximo martes día 13 de diciembre. El procesado es Blas B. A., de 44 años, y ya tenía antecedentes penales por maltrato.

De hecho el mismo día en el que tenía conocimiento de una sentencia firme que le condenaba como autor de un delito de maltrato de género a dos años de prohibición de aproximación a la víctima, "con conocimiento de esta prohibición y de las consecuencias de su incumplimiento" acudió al domicilio de su víctima.

Fue el 13 de octubre de 2010, sobre las 14:50 horas, en la localidad pontevedresa de Salceda de Caselas, según el relato de los hechos que hace la fiscalía.

Relato de los hechos

El acusado entró en el domicilio de su ex compañera sentimental por un ventanuco de ventilación situado en el techo del baño. "Una vez dentro cogió un cuchillo y aguardó la llegada de María del Pilar V. F. "sorprendiéndola por la espalda y colocándole el cuchillo en el cuello mientras le decía que la iba a matar a ella y a su anterior pareja sentimental y que si no mantenía en ese momento relaciones sexuales con él la mataría de inmediato".

El escrito de acusación relata que "el acusado, guiado por un ánimo libidinoso, Blas B. A., empujó a María del Pilar con fuerza y varias veces hasta llevarla al dormitorio". Una vez allí y tras inmovilizarla, la golpeó con el mango del cuchillo en la cabeza. La víctima aprovechó un momento de descuido y llegó a la puerta de la vivienda, abriéndola y pidiendo a gritos ayuda.

El acusado le propinó varios puñetazos en la cabeza, la cogió por el pelo y la arrastró al interior de la vivienda. Una vecina escuchó la llamada de socorro circunstancia que fue aprovechada por la víctima para huir, refugiándose con un grupo de vecinos mientras que el agresor la amenazaba con ponerle una bomba en el coche.

Esa misma tarde el acusado envió mensajes amenazantes al teléfono móvil de la víctima. Blas B. A. concertó una cita con María del Pilar en Vigo. Al encuentro acudieron agentes de la Guardia Civil con el propósito de detenerlo. En un primer momento, antes de ser detenido el acusado huyó enseñándoles a los agentes una pistola simulada y detonando un disparo al aire.

La fiscalía entiende que estos hechos son constitutivos de un delito de allanamiento de morada, uno de agresión sexual en grado de tentativa, uno de detención ilegal, uno de maltrato, otro delito continuado de amenazas y una falta de amenazas por el que se le pide un total de 19 años y medio de prisión.