El alcalde Toledo, Emiliano García-Page, ha planteado este miércoles la posibilidad de cobrar uno o dos euros a aquellos turistas que utilicen los aparcamientos disuasorios de la ciudad.

Esta medida, que si finalmente se aprueba comenzaría a aplicarse a partir del próximo año, contemplaría a aquellos aparcamientos que están bajo el control del Ayuntamiento como son el del Parque de Safont, el de la calle Coronel Baeza y del de la Plaza de Grecia.

La idea del alcalde es obtener "algún rendimiento sin que sea a costa de los toledanos", quienes ha asegurado que van a estar "discriminados positivamente en las imposiciones fiscales" como ésta, para aprovechar así "la riqueza que supone el turismo".

García-Page propone esta medida porque, según ha señalado, estas explanadas es a los toledanos a quienes les cuesta mantenerlas limpias, alumbradas y decentes para su uso.