La iniciativa rechazada defendía la creación de este órgano como autoridad audiovisual independiente encargada de velar por el respeto de los derechos, libertades y valores constitucionales y estatutarios en el ámbito de los medios audiovisuales en Aragón.

La portavoz del Grupo Parlamentario de CHA, Nieves Ibeas, ha abogado por la creación de "un mecanismo que pueda ser un referente social de prestigio y que pueda "regular la actividad audiovisual" en la Comunidad Autónoma bajo los principios de libertad, pluralidad y responsabilidad. Los cometidos estarían orientados a la programación, la publicidad y la concesión de licencias.

El socialista Carlos Tomás, que ha defendido sin éxito una enmienda, ha considerado "prudente" esperar a que se cree el Consejo Estatal Audiovisual porque al crearse mediante una ley básica "nos condicionaría". Tomás ha dicho que el Consejo aragonés garantizaría la transparencia, el pluralismo y la imparcialidad de los medios públicos de comunicación audiovisuales.

El portavoz del Grupo Parlamentario de Izquierda Unida, Adolfo Barrena, ha recordado que las Cortes ya alcanzaron el consenso respecto a la creación del Consejo, tras lo que ha señalado que tan oportuno es esperar a ver "cómo se plantea" el Consejo estatal a "cumplir el compromiso que teníamos por unanimidad".

Por su parte, el portavoz del Grupo Parlamentario del PAR, Alfredo Boné, ha expresado que este Consejo Audivisual de Aragón debería regularse en el marco de la normativa estatal de 1987. "No tiene sentido poner en marcha un nuevo Consejo cuando no se ha desarrollado la Ley", ha opinado.

El diputado del Grupo Parlamentario Popular, Ricardo Canals, ha rechazado la iniciativa argumentando que la oposición tampoco pidió "con ninguna fuerza" la creación del órgano, a lo que ha añadido que el control político de la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión (CARTV) le corresponde a las Cortes, el presupuestario al Consejo de Administración y la gestión corresponde al director general.