El motivo de este encadenamiento es exigir al Ayuntamiento un aplazamiento en la aplicación del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en el distrito, de igual manera que Carmen Cervera lograra una moratoria para el proyecto de reforma del eje Prado-Recoletos tras amenazar con encadenarse a uno de los árboles de esta zona.

"Yo no amenazo con atarme, yo me ato", dijo ayer Otero, quien señaló que "si la baronesa consiguió la moratoria con su amenaza, nosotros esperamos conseguir lo mismo, más aún después de tres meses de protesta".

"Vamos a comprobar si el alcalde tiene el mismo trato con una baronesa que con un ciudadano normal y corriente", añadió, y acto seguido bromeó: "Si ella es una baronesa, yo soy un varón".

Con la cara de Tita Cervera

El parquímetro al que Otero se encadenó, que se encuentra fuera de servicio, pretendía imitar la figura de la baronesa Thyssen y para ello fue ataviado con una cabeza de muñeca dispuesta de una pamela, además de con una rebeca y un sujetador negros, un colgante, una falda blanca con lunares y unas botas negras.

"Quiero trasladar mis respetos a la baronesa", manifestó Otero, quien recordó que con su protesta no pretende "ridiculizar" a Carmen Cervera, sino más bien "invitarla a que nos conozca y a que nos ayude a luchar contra los parquímetros".

El portavoz de Fuencarral, al que acompañaban unos quince vecinos en el momento en que se encadenaba, aseguró que "no haría trampa" y que no se desataría del citado parquímetro hasta la hora fijada, momento en el que se desligó de la máquina para encabezar la manifestación que como cada jueves discurrió por las calles del distrito en protesta por los parquímetros.

En este sentido, Otero, que el próximo mes cumplirá 71 años, calificó de "parche" la reciente decisión del alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, consistente en eliminar todas las plazas azules de aparcamiento de los cascos históricos de los distritos, ya que esta solución "sólo incluye al 1 por ciento de las plazas", explicó.

Ni para ir al baño

Tras comerse las lentejas, los filetes empanados y la ensalada que le llevó su esposa, este vecino aseguró a 20 minutos que no se movería ni para ir al baño, por lo que usó un cubo y una manta.

Voluntarios para  relevar a Otero

Los vecinos del barrio de La Paz, El Pilar y el casco históricos de Fuencarral no quieren que la iniciativa de Jesús Otero se quede en un hecho aislado.

Por ello, en la asociación La Flor ha elaborado una lista de voluntarios para relevar a este jubilado, según dijo ayer su presidenta, Carmen Espinar.

El parquímetro al que se  encadenan desde la mañana del viernes no será el elegido por Otero, a la altura de la calle Sangenjo, 35, sino el que está frente a la Junta Municipal de Fuencarral, porque es más visible y se encuentra en el lugar donde se manifiestan.

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