El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha afirmado en el comité federal de su partido que el contexto de la campaña electoral ha estado basado "en la recaída de agosto con las altas tasas de desempleo", y en "el frenazo del crecimiento económico y los problemas con la prima de riesgo", con los mercados poniendo su foco en la bolsa española.

Sobre su derrota en las elecciones del 20-N, Rubalcaba no ha puesto excusas a la "clara victoria del Partido Popular", sobre el que ha asegurado que "no ha movido su techo electoral, no lo ha superado", mientras que el PSOE ha sufrido una dispersión de votos, de apoyos que han ido a otras formaciones, pero ha defendido que "nuestros votantes se han resistido a votar al PP", por lo que ha rechazado que se esté produciendo una "derechización de España". De esta forma, y según el líder socialista, si el PP "no ha sido capaz de superar ahora los once millones de votos, nunca los superará".

El socialista ha aprovechado para defender los 7 años de gestión socialista en el país, y ha recordado que aprovecharon la época de bonanza económica, en la primera legislatura, para "impulsar nuestros derechos sociales", mientras que los tres años que ha durado la segunda han estado marcados por la crisis económica, que se ha convertido en el "eje fundamental del debate", lo que ha supuesto "un handicap para los políticos, especialmente para los socialistas".

Además, ha recalcado que todas las decisiones que se han tomado en Europa, tanto por Gobiernos u otras instituciones, han estado influídas casi exclusivamente por la mala situación económica, además de por los mercados, a los que se intentó "poner coto", ya que eran "poderosos y desordenados", según Rubalcaba.

Rubalcaba no ha aclarado si optará a suceder a José Luis Rodríguez Zapatero al frente de la secretaria general del PSOE en su comparencia. El socialista ha asumido "en primera persona el mal resultado" del pasado domingo, pero no ha hecho ninguna referencia a su eventual candidatura para liderar el PSOE.

Tras los discursos de Zapatero y Rubalcaba, ha comenzado en el Comité el debate a puerta cerrada de los dirigentes socialistas, que deben convocar el congreso ordinario que renovará en febrero en Sevilla la dirección del partido y su proyecto político.