Agentes de la Policía Nacional se han incautado de 23 kilogramos de heroína y han desarticulado un clan familiar de presuntos narcotraficantes que operaba en la Comunitat Valenciana y Murcia. Los miembros del grupo, asentados en Castellón, adquirían el estupefaciente a un hombre de nacionalidad albanesa afincado en Barcelona y posteriormente lo redistribuían en cantidades importantes a otros "clientes" habituales, con quienes se reunían en localidades próximas a la capital de la Plana para las transacciones.

Según ha informado la Policía en un comunicado, los agentes han realizado una entrada y registro en dos domicilios en Burriana y Onda (Castellón), donde se han intervenido 35 kilos de sustancia de corte, 158.600 euros, una prensa y seis vehículos, entre otros efectos. Algunos de los integrantes de la organización eran buscados para su detención e ingreso en prisión, por lo que utilizaban documentación falsa.

Las pesquisas se iniciaron en febrero de este año cuando se detectó la presencia de un clan asentado en Castellón que distribuía heroína en grandes cantidades. El grupo investigado adquiría importantes partidas de heroína que después redistribuía a otros "clientes" habituales, que se desplazaban hasta localidades cercanas a Castellón donde, tras adoptar "grandes" medidas de seguridad, se reunían con sus proveedores en lugares previamente acordados.

Los investigadores averiguaron que los integrantes del grupo habían concertado una cita con dos personas que iban a desplazarse desde Murcia hasta Castellón para hacerse cargo de una partida de heroína. El dispositivo de vigilancia establecido les condujo hasta la localidad alicantina de Elda, donde los agentes interceptaron el vehículo conducido por los compradores del estupefaciente. En el maletero, y ocultos en un doble fondo, se localizaron dos kilos de heroína, por lo que fueron arrestados. SUMINISTRADOR

Posteriormente, la investigación se centró en las personas que suministraban la droga al presunto clan de narcotraficantes de Castellón. Las pesquisas les permitieron averiguar que se trataba de un individuo albanés asentado en Barcelona y descubrieron que iba a realizar un viaje a Castellón para trasladar una importante partida de droga y cobrar el dinero recaudado por la venta de esta sustancia.

Un nuevo dispositivo policial permitió interceptar y detener al proveedor de la heroína a su llegada a la localidad de Burriana, donde la organización contaba con una vivienda de seguridad. En el vehículo que conducía, en un hueco realizado bajo los asientos delanteros, se localizaron 14 kilos de heroína.

Seguidamente, los investigadores registraron el inmueble donde localizaron en un doble techo del cuarto de baño otros siete kilos del mismo estupefaciente. Además se incautaron de 35 kilos de sustancia de corte escondidos en un armario y una prensa, entre otros efectos. Allí fueron detenidos dos de los presuntos integrantes del grupo familiar investigado, entre ellos su principal responsable.

Posteriormente se registró un chalé en Onda donde intervinieron 158.000 euros en efectivo, además de numerosos teléfonos móviles, ordenadores portátiles, munición del calibre 9 mm y tres vehículos. Otras siete personas supuestamente vinculadas al mismo clan de narcotraficantes resultaron detenidas en ese momento. Un día después se detuvo a otro integrante de la banda en Castellón.

La operación ha sido realizada conjuntamente por la Sección Primera de la Brigada Central de Estupefacientes y GRECO de Levante -adscritas a la UDYCO de la Comisaría General de Policía Judicial-, la UDEV de la Comisaría de Alicante y la UDYCO de la Comisaría de Castellón. También han prestado apoyo la Unidad de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Valencia y la UPR de la Comisaría de Castellón.