La Diputación Provincial ha exigido este martes a la Consejería de Salud que, con "celeridad", aclare si, a día de hoy, "existe esa alerta sanitaria" que la Junta decretó el pasado día 28 de octubre en los municipios malagueños de Benaoján y Montejaque, al determinar que el agua de los depósitos que los abastece no era apta para el consumo humano, ya que, según los últimos análisis encargados por la institución provincial, el agua es apta para el consumo.

En el informe emitido por la Administración autonómica se explicaba que, tras tres análisis realizados en días distintos en la captación del pozo Molino Santo, existía contaminación en el líquido, aunque no así en las pruebas hechas a la red de abastecimiento.

Sin embargo, los últimos análisis encargados por la institución provincial califican el agua como apta para el consumo, según ha precisado en rueda de prensa el diputado provincial de Medio Ambiente, Juan Jesús Bernal, quien ha precisado que "entiendo, comprendo y respeto la decisión de la delegada provincial de Salud —María Antigua Escalera—, en un primer momento, de decretar la alarma sanitaria".

No obstante, "si posteriormente estos índices de contaminación se han reducido y, en otros casos, se han visto como parámetros normales al ser aguas prepotables, que posteriormente se tratan y que pasan al depósito y red de abastecimiento sin ningún tipo de peligro, debemos pedir a la Junta celeridad en la manera de catalogar el agua de estos municipios", ha apuntado Bernal, al tiempo que ha destacado que "no se ha dado ningún caso de enfermedad motivada por contaminación de agua en la zona en los últimos 15 días".

El responsable provincial de Medio Ambiente, que ha estado acompañado por los alcaldes de Benaoján y Montejaque, Francisco Gómez y Diego Sánchez; ha hecho hincapié en que "se tiene conocimiento de que en ningún momento ha existido contaminación ni en el depósito ni en la red de abastecimiento"; y ha explicado que los valores que está exigiendo la Delegación Provincial al agua del pozo se refiere a agua potable, "no prepotable, como es el caso".

"No es agua de manantial, por lo que no se puede pedir unos parámetros como si fuera agua mineral, como no lo es la de ningún pantano que abastece a la provincia, antes de ser tratada y clorada", ha apostillado, recordando que "esta medida afecta hasta la fecha a los 1.600 habitantes de Benaoján y a los 1.000 de Montejaque".

ACTUACIONES

Desde este pasado miércoles, los vecinos de ambas localidades se abastecen con el agua transportada por camiones cubas, los cuales en un primer momento fueron cedidos por el Cuarto Tercio Alejandro Farnesio de la Legión. Esta actuación, con un coste diario de 600 euros, está siendo sufragada por el ente supramunicipal.

Además, la institución provincial tiene prevista la construcción de un depósito para distribuir agua potable en Benaoján, en un sondeo ya existente pero que no está siendo explotado, junto con una nueva acometida en Montejaque, de unos cuatro kilómetros de longitud, para la prospección de un nuevo sondeo que permitiría contar a estos municipios con otros puntos de agua.

Estas obras tendrían un presupuesto de 250.000 euros, más otros 3.000 euros de un filtro de un elemento de filtración que la Delegación Provincial de Salud ha exigido colocar a la entrada del depósito para reducir la turbidez, a pesar de que se encuentra dentro de los niveles aceptables para el consumo.