Las embarcaciones recuperan su espacio natural junto al mar

Los veraneantes ven las barcas como un lugar de apoyo para la ropa y los complementos.
Barcas y bañistas comparten arenal en esta postal marinera.
Barcas y bañistas comparten arenal en esta postal marinera.
M. Vila
Barcas y bañistas comparten arenal en esta postal marinera.
Lo que en un principio puede verse como un obstáculo que resta espacio al arenal se ha convertido, con el paso del tiempo, en un complemento útil y cómodo para bañistas y pescadores.Las embarcaciones más tradicionales recuperan en la playa de As Barcas su enclave natural, en el que descansan en los alrededor de 130 metros de largo y 15 de ancho del arenal.

Su agua ha sido calificada de «excelente» en un reciente estudio llevado a por el Ayuntamiento. Además, tiene una temperatura media que ronda los 21 grados.

Entre sus usuarios reina la heterogeneidad. Grupos de adolescentes, familias completas y jóvenes solos, interesados en conseguir el mejor bronceado, se mezclan con las embarcaciones y las dunas protegidas de la playa.

Y es que, son precisamente estas dunas las que imponen entre las rocas el toque de color, con flores en llamativos tonos violeta y amarillo.

Seguridad: Se habilitará un puesto de Cruz Roja desde la segunda quincena de junio hasta el 15 de septiembre, con dos socorristas.

Servicios: Tres rampas de acceso, paseo de madera que conecta con las playas de A Fontaíña y O Vao. Dos duchas y una fuente de agua potable.

Accesos

A pie: Desde la playa de Samil.

Coche: Accesos desde la avenida de Castelao, una vez se ha pasado la playa de Samil.

Buses: Vitrasa: líneas 10 y 11. A partir del 15 de junio también C4C, 12A y C3.

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